Entró la veda electoral. Hemos visto de todo en esta campaña electoral, pero en esta su muy bienvenida recta final, es cuando mucho más cuidado debemos tener, porque lo viene, será la peor parte.

Como en el México contra Brasil, nada está dicho aún. Por más encuestas que se publiciten, el único resultado que contará será el del 1 de julio, por lo que es fácil imaginar que nadie se rendirá, ni siquiera el triste ocupante del tercer lugar de las preferencias, y mucho más, cuando todos sabemos que el electoral mexicano es, tristemente, muy voluble y traicionero con los mesías de turno. 

Si las “denuncias”, #FakeNews, opiniones disfrazadas de verdad, bots y troll, tendencias falsas fueron la sal y pimienta de esta campaña, en estos dos días viviremos la más virulenta y viral campaña de todos contra todos. Las redes sociales, aún cuando no seamos afectos a la política, estarán a reventar de difamaciones, la gran mayoría, a manos de nuestros propios amigos, contactos o seguidores que se dejan llevar por el calor de la polémica y la necesidad de ser “el primero” en compartir el “notición” que favorezca a su candidato.

Baños con agua fría, o en su defecto, mucha paciencia y cuidado, es lo que debemos tener antes de la jornada electoral. Si hemos recomendado tener cuidado con lo que compartimos, en estos días las precauciones deben extremarse, pues si antes era común que una noche antes de las elecciones los partidos volantearán difamaciones en las colonias populares, hoy las redes sociales están expuestas a inundarse de trending topics y videos virales evidentemente falsos, pero tan bien hechos, que logran engañar a los usuarios.

Recordemos. Si algo suena demasiado bueno para ser cierto, hay que dudar y no compartirlo con prontitud. Aunque Facebook ha tratado de combatir publicaciones trampa, es un hecho que la gente da clic en las noticias con frases que invitan a jugar o generar dudas y curiosidad. Si bien es cierto que no todas éstas son bulos, sí debemos ser escépticos al seguir los links tipo “y mira lo que pasó después”.

Tal vez se ha dicho en muchas ocasiones, pero nunca está de más recordar que es en la jornada electoral, y no sólo en las redes sociales, donde debemos demostrar nuestro interés por la política, y que a fin de cuentas, votar no es algo tan baladí como dar “me gusta”.

 

Tengamos cuidado en lo que compartimos. Si somos tan celosos de nuestra imagen digital, hagamos lo propio con la información que deseamos esté relacionada con nosotros, pues sólo así seremos capaces de mantener la cabeza fría al momento de llegar a las urnas este domingo.