Milenio Novedades
MÉRIDA, Yuc.- “Tras siete años de que la verja que rodea el atrio de la Catedral de Mérida no contara con ninguna reparación y mantenimiento, hace tres semanas sostuvimos una reunión con funcionarios municipales para que se tome cartas en el asunto”, informó ayer el sacerdote Pedro Mena Díaz, coordinador de la Comisión de Arte Sacro de la Arquidiócesis de Yucatán.

En esa reunión, agregó, estuvieron presentes César Bojórquez Zapata, coordinador de Funcionamiento Urbano del Ayuntamiento de Mérida, y la arquitecta Marisol Ordaz, subdirectora de Patrimonio Histórico, quienes se comprometieron a dar pronta respuesta a ésta y otras peticiones relacionadas con el cuidado de la Catedral de Mérida.

“Nosotros fuimos categóricos en nuestro planteamiento: o se repara el enverjado como es debido, es decir, con la calidad y durabilidad de los materiales que se requieren, o mejor que la retiren”, enfatizó el presbítero.

El mal estado en que se encuentra el enverjado de la Catedral es cada día más visible. Al respecto, el religioso, de acuerdo con un comunicado, indicó que no es posible que la Catedral siga con un enverjado que deja mucho que desear y sobre todo porque dan una mala imagen a un sitio tan importante de la ciudad.

“Entendemos que en este tema confluyen muchos criterios y que se necesita la participación de diversas instancias las cuales deben avalar la calidad del trabajo que se realice, entre ellas el Instituto Nacional de Antropología e Historia, quienes en este caso fungirían como supervisores únicamente, pero es muy necesario que ya se intervenga en la reparación el enverjado que está en muy mal estado”, dijo.