Víctor Hugo Lizama Morales/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- Uno de los padecimientos más comunes en nuestra Península es el problema de piedra en el riñón. Los cálculos renales son algo tremendamente doloroso y complica la vida de cualquier persona que los padezca. Pero, afortunadamente, pueden emplear remedios naturales para que se reduzcan y también para atenuar los dolores que provocan.

Nos gustan los testimonios reales de la medicina natural y aquí les compartimos algunas experiencias.

Nuestro amigo José Loeza cuenta que trajo Elemuy y Chintok, de Loltún, para una trabajadora de cierta agencia de viajes y gracias a la infusión de estos maravillosos productos en una semana esta persona pasó arenillas y piedra. Esta medicina se la proporcionó “El Zotz”, gran conocedor de hierbas y remedios que vive ahí cerca de las grutas de Loltún.

El amigo Hugo Moguel hace apenas un mes y medio, tomando infusión de Claudiosa, logró eliminar dos piedras y arenillas renales. Según él, sólo tomó tres veces la Claudiosa, hirviendo un manojo de ésta en un litro de agua.

Otra persona que no quiso que se publique su nombre nos relató que “el año pasado me di cuenta de que tenía dificultad para orinar y experimenté el dolor de espalda baja. Mi examen médico mostró cálculos renales.

Después de un mes de consumir Moringa, el resultado del ultrasonido mostró que mis cálculos renales eran pulverizados y sólo unos pocos se quedaron. Mi riñón funciona mucho mejor. Puedo orinar normalmente y no sufro más de dolor de espalda baja.

Los análisis comprueban que la hoja de la Moringa se compara favorablemente con la leche en polvo en cuanto a sus componentes de proteína y de calcio y tiene, adicionalmente, un alto contenido de vitamina A. Además de su valor nutritivo, las hojas son ricas en antioxidantes y  presenta propiedades anticancerígenas, hipotensoras, hipoglucemiantes y antibióticas.

No encontramos argumentos en contra del consumo de la planta. En resumen, Moringa oleífera es un alimento nutritivo y benéfico.