Se fue el mes de abril y vaya que hizo historia pura con sus lluvias, al menos en la zona norte de Mérida –fue el mes de abril más lluvioso de los últimos 20 años cuando menos-, en un calendario que se está caracterizando por el comportamiento impredecible del clima que está teniendo; ya enero también puso su granito de arena en la historia.

¿Qué sigue? Pues viene el calor de nuevo y por el momento no se vislumbra ningún frente frío que se acerque a la Península de Yucatán –los que llegaron fueron los causantes de los temporales atípicos- y todo parece indicar que muy pronto comenzarán las lluvias de esta época que oficialmente deben de empezar a partir de la segunda quincena de mayo.

De acuerdo con los modelos de predicción, se espera un mes de mayo bastante húmedo y que amaine la sequía, por lo que no sería nada raro que la temporada de lluvias comience, como dicen los cánones, a partir de la segunda quincena de mayo o quizá un poco antes. Pudiera ser que esto sucediera.

Hay que recordar que la temporada de lluvias se debe a la llegada de aire marítimo tropical del Mar Caribe, que favorece el potencial de ocurrencia de precipitaciones pluviales y que vendrán de dirección del este y no del oeste como estuvo sucediendo en abril, las cuales provenían de esta dirección porque eran generadas por masas de aire polar que acompañaban a los frentes fríos.

Lo que es un hecho es que en los siguientes días los campesinos ya pueden reanudar las quemas de sus milpas, de hecho a partir del 1 de mayo, y finalizarán cuando empiece en forma la temporada de lluvias.

También ya estamos a un mes de que se inicie oficialmente la temporada de huracanes 2018 que, en el Atlántico, deberá de comenzar el próximo 1 de junio; la parte más intensa de las emociones del año durará hasta el próximo 30 de noviembre.