Joel González/SIPSE
MÉRIDA, Yucatán.- En la actualidad es algo común encontrar en las calles puestos dedicados a la venta de películas piratas. En la ciudad uno de los principales puntos de comercio de material apócrifo se encuentra en pleno centro.

Destaca el comercio de los llamados “clones” de películas en DVD, los cuales se ofertan a un costo sumamente menor al de discos originales.

En el tramo comprendido entre la calle 62 entre 65 y 67 existen tres locales con este giro; en la 67, entre 62 y 64, son 4; misma cantidad que en la zona de la 60 y 62; sobre la 60 entre 65 y 67 existen 5; y un par en la 62 entre 67 y 69, en los alrededores de la Plaza Grande.

Estos videogramas ofrecen un amplio espectro, que va desde ejercicios, documentales, música y conciertos.

Son de los negocios más concurridos en la ciudad, con ramificaciones, incluso, en la periferia y en los mercaditos y tianguis, debido a la facilidad por conseguirlas, su bajo precio y a que salen a veces hasta antes del estreno en cines.

Otra de las causas que elevan sus ventas son el alto costo de las entradas a los cines, que duplica el del material apócrifo, sin mencionar que van familias a las salas, además de gastos extra, como palomitas, refrescos y otras golosinas.  

También tienen buena demanda los discos con material para adultos, los cuales busca el 10% de los compradores. 

El dato preocupante en este segmento es el aumento en la petición de pornografía infantil, del cual regularmente se niega su posesión, pero “algunos conocen a alguien que puede conseguirlas en cualquier momento”.

Notoriedad

• Los puestos de discos piratas son sumamente notorios a pesar de estar varios de ellos en pleno centro de la ciudad y promueven sus productos apócrifos, cuya venta está prohibida, a todo volumen.