Cecilia Ricárdez/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- El Arzobispo de Yucatán, Emilio Carlos Berlie Belaunzarán, ofició la misa diocesana de institución de ministros y de envío, en la que cientos de católicos entre jóvenes y adultos se comprometieron a evangelizar en comunidades alejadas de Yucatán durante la próxima Semana Santa. 

La ceremonia se efectuó en el Colegio Teresiano con la presencia de los familiares de los participantes, religiosas y sacerdotes, encabezados por el presbítero Juan Pablo Moo Garrido, titular de la Dimensión Diocesana de Catequesis.

“La iglesia nos alimenta como buena madre, con el pan de la palabra y de la Eucaristía, pero todo trabajo implica muchos sacrificios, porque la verdadera felicidad no está hecha de inanición, sino de esfuerzo y decisión, acuérdense: ser lo que soy, ahí donde estoy, y serlo de la mejor  manera, es el mejor homenaje que podemos hacerle a nuestro Señor. Verán que esa pequeña semilla aparentemente tan humilde que en ustedes cae, germinará, crecerá y fructificará en beneficio de quienes hayan ido ayudar y a ustedes mismos, porque siempre que hacemos el bien, los principales beneficiados somos nosotros”, expresó el prelado durante la homilía.

Posteriormente, los feligreses que se prepararon para anunciar el evangelio en las comunidades recibieron el ministerio extraordinario para la distribución de la comunión en las actividades religiosas de la Semana Mayor.

“Queridos hermanos al participar hoy de esta celebración, renuevan en cierto la manera de operar de la iglesia primitiva cuando llena de gozo enviaba algunos de sus hijos a otros pueblos, para ayudar a los hermanos en la fe, o a los que aún no habían conocido a Cristo.  Los ministros extraordinarios de la sagrada comunión podrán darse la comunión a sí mismos, distribuirla a los fieles, llevarla a los enfermos y administrar el viático…Procuren ser por su fe y caridad modelo para sus hermanos”, abundó el Arzobispo durante el rito. 

La capacitación  de los ministros se desarrolló en seis sesiones durante el presente mes, en la parroquia de Nuestra Señora de Lourdes. Cada año se suman al menos 170 ministros, quienes a su vez coordinan grupos de mínimo 15 integrantes, para apoyar al presbiterado de la Arquidiócesis de Yucatán para la realización de ceremonias, en sitios donde no llegan los sacerdotes.