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MERIDA.-Ante un acelerado y agitado estilo de vida, cuidar nuestra salud mental se ha convertido en una prioridad, ya que con el “bombardeo” de información en las redes sociales y dispositivos tecnológicos que acaparan nuestra atención, el bienestar mental se ve afectado, generando cambios en el cuerpo y mente, que pueden ser perjudiciales para la vida.

En el marco del “Día Mundial de la Salud Mental”, conmemorado el pasado 10 de octubre, ésta se define como el estado de equilibrio que debe existir entre las personas y el entorno sociocultural que los rodea; incluye el bienestar emocional, psíquico y social e influye en cómo la persona piensa, siente, actúa y reacciona ante momentos de estrés.

Adrián Novelo, psiquiatra del Hospital General Regional No. 1 del IMSS en Yucatán, apuntó que la salud mental es la base para el bienestar y funcionamiento de una persona y su entorno.

Las enfermedades mentales son condiciones que pueden afectar la manera de pensar, humor y comportamiento. Pueden ser ocasionales o de larga duración, y llegan a afectar la capacidad de relacionarse con los demás y el cumplimiento, de las actividades diarias.

Los problemas mentales son muy comunes, y muchas veces al llevar un tratamiento como terapia psicológica se pueden superar; sin embargo, si éstos no mejoran o no se atienden a tiempo, llegan a provocar diversas enfermedades, tales como la depresión, bipolaridad e incluso la persona puede desarrollar pensamientos suicidas.