José Salazar/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- La insuficiencia renal crónica (IRC) es una enfermedad en la cual los riñones dejan de funcionar correctamente; muchas veces se presenta con ausencia de síntomas, por lo que se llega a detectar en un estado muy avanzado.  

La mayoría de los pacientes con ese mal se encuentra en edad productiva, entre 30 y 50 años, informó María Teresa Pérez Santana, jefa del Departamento Clínico de Trasplantes Renales del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

Indicó que los pacientes con IRC requiere terapias y tratamiento de reemplazo como la hemodiálisis, que consiste en depurar o limpiar la sangre de las toxinas utilizando una máquina especial que se conecta al cuerpo a través de un catéter.

Por otra parte, María Fernanda Arce Amaré, presidenta de la Asociación Mexicana para el Estudio de Acidosis Tubular Renal, A.C. explica que el proceso de hemodiálisis tiene 70 años de haberse inventado y no se ha registrado un cambio fundamental en cuanto a su aplicación.

“La Fundación del Riñón de los Países Bajos ha invertido e investigado para fabricar un prototipo de riñón artificial portátil, que es como una pequeña máquina de hemodiálisis sólo que el paciente en vez de estar conectado sin moverse en un hospital en sesiones de cuatro horas, tres veces a la semana, puede llevar el aparato colgado lo que le permite retomar su vida laboral. Puede comenzar a llevar una vida más o menos normal y no sentirse como un prisionero”, señaló.

La fundación holandesa realiza una campaña a nivel mundial con el fin de recaudar fondos para fabricar los primeros 10 prototipos de riñón artificial, lo que permitirá en un futuro cercano cambiar la vida de los pacientes que padecen insuficiencia renal. 

Explicó que para ese fin se requiere recaudar diez millones de euros. La campaña, que se lanzó a principios de este mes se basa en el cortometraje titulado El Prisionero.

“El corto trata de un paciente renal que es prisionero de una cárcel de alta seguridad en Amsterdan, Holanda. Este paciente puede salir tres veces a la semana, sin ningún tipo de vigilancia o guardia que lo acompañe para dirigirse al hospital para recibir su terapia de hemodiálisis. Lo curioso es que el paciente no intenta escapar porque quien le provee su terapia para evitar su muerte es la propia cárcel, es decir, metafóricamente el hombre es prisionero de su enfermedad”, detalla.

Una vez fabricados los prototipos de riñón artificial, la fundación elegirá a los pacientes que serán los primeros que utilizarán estos aparatos. Se espera que alguno llegue a México y en un futuro cercano se pueda beneficiar a la población que padece insuficiencia renal. 

“Esperamos poder brindar esperanza a los pacientes renales de México y todo el mundo. No es algo tan lejano, hay que ver éstos como un avance en las terapias sustitutivas para los pacientes renales”, expresó.

Los fondos se recaudan por medio de una página web que coordina la Fundación Holandesa del Riñón. La dirección es: https://www.helpthemescape.org/es

Hasta el momento esta página lleva recaudado poco más de 20 mil euros.

En aumento y de alto costo

• La insuficiencia renal está considerada como catastrófica por su número creciente de casos y su costo

El Dato

• 23,832  sesiones de hemodiálisis se realizan al año en el IMSS Yucatán.
• 90 sesiones se llevan a cabo en un día en la institución.
• Octava causa de muerte en personas entre los 40 y 65 años de edad en el estado, según cifras del Inegi.