Coral Díaz/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- En el manejo de las emociones está el rescate de la vida de cada persona, indicó Rosy Sandoval, especialista en autoconocimiento y fortalecimiento del ser, invitada al programa radiofónico Salvemos Una Vida, que se transmite los viernes por el 100.1 de La Nueva Amor.

Bajo la conducción de Alis García y Esperanza Nieto, la experta platicó sobre el taller de introducción al conocimiento de la mente, emoción, energía y su aplicación que ofreció en Mérida hace unos días.

Indicó que parte de su trabajo en estos talleres es compartir lo que ha cambiado su vida mediante el autoconocimiento.

“Porque si yo sé cómo funciona mi mente, si yo sé cómo funcionan mis emociones y mi energía, cómo sacarle provecho, no destruirme sino construirme con todos mis elementos tan maravillosos que Dios, Buda o energía, en lo que crea cada quien, todos tienen la capacidad de estar bien nada más que nuestra mente está programada por lo que nada más hay que resetear, borrar y meter información nueva”, argumentó.

De esta manera, dijo que si la persona creció pensando que era un torpe, que no merecía nada, que era un lento, un berrinchudo o un bueno para nada, ahora va a comprobarse a sí mismo y reprogramar que es capaz, que merece, que es abundante, pleno y merece ser feliz.

Alis García refirió que el manejo de las emociones nunca se enseña en la escuela, ni en la casa, por lo que es muy complicado entender incluso qué es una emoción y cómo manejarlas para bien.

Rosy Sandoval dijo al respecto que ha estudiado diferentes disciplinas para tener más conocimiento y siempre ha diferenciado el cuerpo físico, que se ve en el espejo del espiritual o energético.

“Es momento que entendamos que ese cuerpo energético, nuestra alma, como cada quien lo identifique, se comunica con el cuerpo físico a través de las emociones que vienen del alma, eso es la emoción original; los sentimentalismos es todo aquello que empieza a surgir a partir del físico, del ego, de la historia”, apuntó.

Mencionó que las emociones son la comunicación de lo interno con el cuerpo físico, lo externo, “puedes ver que la base del iceberg tiene dos opciones, el temor o el amor. En el caso del temor se relaciona más con el cuerpo físico y el amor está vinculado directamente con el cuerpo energético, el alma, espíritu”.

“Entonces como estamos muy relacionados con el físico, lo que más predomina es el temor porque no conocemos que dentro de nosotros está esa chispa divina, de la que somos hechos a imagen y semejanza; si supiéramos que un poco de esa chispa está dentro de mí confiaría más en mí, sabría mi capacidad y que soy inmensamente abundante, porque si esa chispa divina fue la creadora de todo el universo, de toda la vida, de todo lo que somos, entonces soy capaz”, destacó.

Rosy Sandoval dijo que es el momento de salir del punto ciego y si realmente se quiere tener una gran herramienta, lo importante es mirar la vida, “ponte de observador de tu vida y ve en qué dirección llevas la vida constantemente, con qué personas te relacionas”.

Dijo que si la persona fue víctima tiene que pensar que ya pasó, no se debe ser víctima de sí mismo y acabar con eso por más duro que haya sido, queriéndose a sí mismos, pensando que el que se equivocó no lo supo hacer de otra manera y no repetirlo.

“No hay peor victimario de sí mismo que la víctima porque es el peor se hace daño a él, al estar culpando al clima, a Dios, a la familia, a la pareja, todo es culpa de los demás y les va tremendo, por lo que para empezar es necesario salirse del papel de víctima, salirse de punto ciego y hacerse responsable de la vida con fortaleza profunda, responsabilidad, amor”, enfatizó.

Recomendó ponerse un hilo en cualquier muñeca, “pero no significa nada milagroso, el hilo sólo es para recordar que hoy escuchaste algo que puede cambiar tu vida. Cada que veas ese hilo en la muñeca agradece por la vida y piensa si tienes hijos, casa y existencia; vuelves a ver el listón y agregas otras tres cosas que tienes”.

Indicó que este proceso se debe realizar las 24 horas durante 21 días, es para cambiar el foco de  lo que no tiene a lo que sí tiene.