Salvemos una vida: Especialista enseña a unir cuerpo, mente y espíritu

Alejandra Jiménez Virgen, en su segunda visita al programa “Salvemos Una Vida”, explica la importancia de la oración.

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La oración tiene el papel de encomendar y encender el espíritu en nuestra vida diaria. (SIPSE)
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Coral Díaz/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- En una segunda entrega, el programa radiofónico “Salvemos Una Vida”, que se transmite todos los viernes por Amor 100.1, abordó el tema del “el espíritu”, para dar seguimiento a las palabras de Alejandra Jiménez Virgen experta en ontología, quien está de visita en Mérida.

De esta manera, bajo la conducción de Alis García y Esperanza Nieto, se transmitió el programa que arrancó con la importancia de la oración, que conlleva al bienestar físico, mental y espiritual.

Al respecto, Alis García mencionó que todo está íntimamente relacionado, porque muchas veces las personas no están conscientes de que son cuerpo, alma y espíritu, de que somos una trinidad por lo que todo trabaja en conjunto. 

Apuntó también que: “Debemos estar conscientes con los que están a nuestro alrededor, especialmente en nuestras familias, con nuestros hijos y con nuestros padres”.

En su intervención, Alejandra Jiménez indicó que el espíritu no puede caminar por sí solo si no hay una acción que provenga del cuerpo y una acción de inteligencia o de discernimiento que provenga del pensamiento.

“Entonces, hacer oración en la mañana es primordial, porque tiene el papel de encomendar y encender el espíritu, es decir: la oración es la gasolina del espíritu, por lo que siempre debe llevar esta fuerza de decir acepto a Jesús como Mi Señor y proceder a suplicar en nombre de Jesús, porque es la fuerza lo que lo resucitó”, apuntó.

Recordó que cuando se dice “en nombre de Jesús”, lo que se está manifestando es la invocación, la solicitud, la demanda llena de fuerza, llena de pasión, de fe, en la que la fuerza que resucitó y llevó a los cielos a Jesucristo, es la fuerza que va a bajar a ayudar.

“Tal vez usted tiene que levantar una olla de tamales todos los días y es muy pesado, pero no es lo mismo que usted la levante y diga: ‘en nombre sea de nuestro Señor Jesucristo’, pues cargar la olla de tamales será menos pesada, tendrá mejor venta y su trato con los demás va a cambiar, porque todos en el espíritu estamos conectados”, apuntó.

Invalidez de espíritu

Mencionó que existe una enfermedad que se llama invalidez de espíritu, que es cuando psicológicamente una persona ya fue golpeada, violentada y abusada, como lo que pasa en las escuelas con el problema del “bullying”, de que los chicos ya no se defienden y no acusan.

“Primero porque estas personas víctimas de violencia, tienen miedo que les vaya peor, porque si se quejan tienen miedo que les pongan una golpiza mayor o un trato peor, pero llega el momento en que se debe recordar que el espíritu se templa cuando pasa la prueba de fuego”, refirió.

Entonces, la experta en salud mental, dijo que  “si nosotros no nos levantamos y decimos basta, no estamos sólo dejando que nos pateen y nos moldeen el cuerpo, estamos también permitiendo que nos estén apagando nuestra fuerza con la que Dios nos mandó a la tierra”.

Destacó que cuando una persona inicia su día y se encomienden diciendo “Acepto a Jesús como mi Señor”, está usando cinco palabras para ver a su alma libre de toda condena.

Solicitud al Padre

También se le puede solicitar al Padre: “en el nombre de Jesús, Padre eterno, te solicito que el día de hoy sea para mí y nuestra familia productivo, sea encontrado en tu gloria, que aunque no tenga trabajo lo encuentre, que el que se sienta lastimado vea consuelo, que aquel que se encuentre en hambre tenga el pan de cada día”.

“Usted está pidiendo de esta forma que la fuerza que resucitó a Jesús actúe  en su plegaria, entonces recuerde que lo que solicite sea en nombre de Jesús y seamos maduros y no digamos en nombre de Jesús me quiero casar con fulano, sino si se quiere un cambio de ese tipo decir en nombre de Jesús que llegue a mi vida esa persona idónea con la que podré ser feliz y tendré una vida sana y armoniosa”, puntualizó.

La experta, mencionó que no se debe olvidar que sólo es el nombre de Jesús para dar órdenes, sino también para dar gracias “en nombre de Jesús gracias por una noche tranquila y bendice a mi familia y a todos con los que hoy me encuentro para que tengamos un maravilloso día en tu nombre”.

Asimismo, dijo que se debe solicitar al espíritu para que camine dispuesto, para poder servir, ser útiles y cumplir la misión que Dios entregó desde los tiempos previos a los orígenes de las almas; en primera instancia tener don de conocimiento, que trasciende en carisma de sabiduría, así sea lavar, planchar, cocer el arroz, que se realice en amor y alegría.

Después se debe solicitar tener el don de discernimiento, para saber ¿hasta dónde se está bien y hasta dónde está mal?

“Entonces discierna, hay toda la ayuda necesaria en todo este estado maravilloso para que usted resuelva lo que le pertenece a su discernimiento, salir adelante y ser feliz”, subrayó. 

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