José Salazar/Milenio Novedades
MÉRIDA.- Durante la primera semana de la temporada de influenza estacional 2018-2019 se registraron en Yucatán 10 casos probables, sin embargo, ninguno dio positivo a la enfermedad.

Cabe señalar que el brote de influenza que se dio fuera de la temporada, entre los meses de julio y octubre, concluyó 329 casos positivos y 39 fallecimientos, producto de dos mil 325 casos que fueron catalogados como probables de influenza. El 90 por ciento de los casos y muertes estuvieron relacionados por la cepa AH1N1.

Las defunciones superaron en 62 por ciento a las que se registraron durante la epidemia de 2009, que fueron 24.

En el reporte de la semana epidemiológica 40 (corte al 4 de octubre), la primera de la temporada de influenza se reportan 237 casos probables de la enfermedad y ninguno positivo al padecimiento.

De acuerdo con los lineamientos de la Secretaría de Salud, se considera como caso probable a toda aquella persona con enfermedad respiratoria febril aguda (Enfermedad tipo influenza [ETI] o insuficiencia respiratoria aguda grave [IRAG]).

Síntomas

La influenza del tipo AH1N1 es causada por el nuevo virus de influenza A, que pertenece a la familia Orthomixoviridae. Afecta principalmente a los cerdos y los subtipos más frecuentes son H1N1 y H3N2, aunque estos virus por lo general son específicos de los cerdos; en ocasiones pueden mutar y transmitir la infección a humanos.

La influenza suele presentarse con inicio súbito de fiebre mayor de 38.5 grados, dolor de cabeza (cefalea) intenso, tos, dolor muscular y articular con malestar generalizado.

También se puede presentar dolor faríngeo, náusea, vómitos y diarrea. Se transmite fácilmente de persona a persona al hablar, por estornudos y se asimila a un cuadro de catarro común causado por virus de otras familias.

Para prevenir el contagio se deben tomar medidas de prevención básicas como el lavado de manos con agua y jabón frecuentemente, si no es posible, utilizar alcohol-gel. Se debe cubrir nariz y boca con un pañuelo desechable al estornudar o toser, evitar tocar los ojos, la nariz y la boca; evitar asistir a lugares concurridos así como escupir en el suelo y en otras superficies expuestas al medio ambiente.

Invariablemente, evitar saludar de mano, de beso o de abrazo, compartir vasos, platos y cubiertos, así como alimentos, bebidas y utensilios de aseo personal. Seguir las recomendaciones del médico y evitar automedicarse.