Ana Hernández/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- La delegación de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) en Yucatán está trabajando con las autoridades de Quintana Roo y Campeche para crear una línea de inteligencia común, que pueda combatir actividades ilegales como el procesamiento del carbón vegetal.

En Yucatán existe “un movimiento criminal organizado que se dedica al aprovechamiento ilegal del carbón, están bien organizados, porque hay quien extrae, transporta y quien vende, hay canales de distribución y hay jerarquía”, señaló el delegado de la Profepa en la entidad, José Lafontaine Hamui. 

“Con el apoyo de la denuncia ciudadana se ha combatido este problema… pero mientras haya demanda del (producto) en los estados del norte va a ser muy difícil que las autoridades puedan erradicar este problema; la zona de Yaxcabá es donde hemos enfocado nuestras fuerzas y muchos reportes de sitio extracción de carbón, pues es la unión de lo que viene de Quintana Roo, Yucatán también sirve de transporte de otras entidades.

Como informamos, la Profepa dio a conocer el domingo se aseguraron 42.7 toneladas de carbón vegetal y clausuró temporalmente el centro de almacenamiento ubicado en el municipio de Kanasín, Yucatán; los encargados del lugar no contaban con la documentación que acreditara la procedencia legal del producto, que estaba en bolsas de carbón mezquite que es diferente al que fabrica una empresa en Monterrey.

El delegado señaló que ante la negativa de inspección en ese lugar, pidieron el apoyo de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) para ingresar y realizar su trabajo; luego otorgó un plazo de cinco días para comprobar la procedencia legal del material incautado y al no obtener los papeles que lo demostrarán se presentó la denuncia ante la Procuraduría General de la República (PGR).

En agosto del 2013, los inspectores de la Profepa aseguraron más de 26 toneladas de carbón que se transportaban de Mérida a Cancún, Quintana Roo, la unidad también fue asegurada. El último hallazgo de estos “tizones” ocurrió hace unas dos semanas, sin embargo el comunicado de prensa lo “sóltó” la oficina central el domingo pasado.

Según los datos estos “golpes” al tráfico ilegal de carbón, han permitido en dos años el aseguramiento de 200 toneladas de ese producto, lo cual –dijo- el funcionario da una idea de la gravedad del problema.