William Casanova/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- El regidor priista Rubén Segura Pérez calificó como una irresponsabilidad no haber informado a la ciudadanía el ajuste a las tarifas de la empresa Sana en la zona norte de la ciudad y consideró que esta irregularidad evidencia la inoperatividad del Ayuntamiento meridano, que encabeza Renán Barrera Concha.

Recordó que el 1 de noviembre pasado le dieron un voto de confianza a la actual administración al aprobar ajustes en el servicio de recolección de basura, pero se basaron “en la información que en su momento se proporcionó, sin embargo ahora vemos posibles delitos y responsabilidades.”

“Los regidores del PRI nos sentimos defraudados y engañados por el presidente municipal Renán Barrera Concha y no seremos cómplices de esta situación”, recalcó Segura Pérez.

“Estamos nuevamente ante un caso que deja a la vista la falta de compromiso ciudadano y el hermetismo que prevalece por el presidente municipal en torno al caso de la empresa Sana”, señaló Segura Pérez, integrante de la Comisión de Servicios Públicos Municipales.

Recalcó que a la fecha, Renán Barrera Concha no ha atendido la queja presentada en Contraloría Municipal el pasado 14 de noviembre por los regidores del Revolucionario Institucional, por lo que el ajuste a las tarifas se suma a la falta de información denunciada en varias ocasiones en Cabildo por la bancada priista y al silencio de dos meses y tres semanas del alcalde.

Enfatizó que el Ayuntamiento está obligado a realizar una campaña dirigida a la ciudadanía para informar de los ajustes a las tarifas de la empresa Sana y que esta situación se debió presentar en Cabildo.

“Los integrantes del Cabildo o al menos los regidores del PRI desconocemos totalmente este ajuste a las tarifas, que se debió presentar en Cabildo para revisar las condiciones y cuántos predios serían afectados, por lo que nuevamente estamos ante el hermetismo del alcalde para favorecer a los propietarios de la empresa Sana”, manifestó.

Sospechas

En el recurso ante la Contraloría, los ediles del PRI recalcan que “hay un vínculo sospechoso entre Barrera Concha y los propietarios de la empresa recolectora de basura Sana, la cual influyó en la transferencia de clientes de la paramunicipal Servilimpia, únicamente a esa empresa, sin tomar en cuenta a las otras firmas recolectoras.

“Hay indicios de que Renán Barrera proporcionó información privilegiada a Sana, para que ésta pudiera comprar determinado número de vehículos para la prestación del servicio, mucho antes que fuera sujeto del beneficio de la ampliación de la cobertura de recolección de desechos sólidos en Mérida.”

En este contexto, los regidores del PRI, que tenemos el deber y la responsabilidad de velar por los intereses generales de la sociedad, solicitamos que la Contraloría investigue los hechos.