Candelario Robles/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- Repuntes de 35 a 50 por ciento en sus ventas reportan comercios organizados por la temporada de calor, en que los aires acondicionados, “mini splits” y ventiladores son los más demandados para mitigar las altas temperaturas.

El dirigente estatal de la Cacacome, José Manuel López Campos, resaltó que esta temporada representa una oportunidad de negocio para el comercio de Mérida.

“La oportunidad de negocio por las temperaturas elevadas es equiparable para algunos comercios con la temporada de ventas de Navidad, es una derrama muy grande que va de 35 hasta un 50 por ciento más”, detalló.

Dijo que, según reportes de los empresarios afiliados a la Canacome, las ventas de aires acondicionados, “mini splits” y ventiladores son las “joyas de la corona” en ventas por temporada con repuntes de hasta el 50 por ciento.

“Las compras se hacen por necesidad y por impulso más que por una previsión, de manera que los efectos del calor originan el aumento en las ventas”, expresó.

Añadió que otros de los giros comerciales que ven elevados sus ingresos en más del 35 por ciento, son las fábricas de hielo y agua purificada.

En menor grado, expuso, los comercios que expenden sillas, mesas y artículos para jardín también tienen ventas de hasta 15 por ciento más.

“En esta temporada de calor los que venden aires acondicionados y ventiladores aumentan sus ventas hasta en un 50 por ciento”, aseguró.

Explicó que para la adquisición de otros productos muchas personas esperan las promociones, “pero cuando se trata de una necesidad, o cuando el producto es un satisfactor como es el caso del aire acondicionado o los ventiladores es cuando compran directamente sin ponderar gastos”, sostuvo.

López Campos explicó que durante el arranque de la temporada de calor las ventas inician con un crecimiento de hasta el 50 por ciento.

“Las ventas se ven frenadas con la llegada de agosto y septiembre cuando empiezan las ventas por retorno a clases”, dijo.

Informales

Los vendedores informales sacan jugo de las altas temperaturas y duplican precios de los artículos utilizados para mitigar el calor.

Como ejemplo, un ventilador de 10 pulgadas que a principio de año costaba 150 pesos, hoy en el “mercado negro” su precio está cerca de los 400 pesos, aunque con regateo lo puede uno llevar hasta en 300.

El sector de la informalidad es el más beneficiado con la temporada de calor, puesto que muchos de los productos utilizados para evitar las altas temperaturas se encuentran aquí a precios “bajos”.

No obstante, la Canaco acusó que la venta de productos como ventiladores, climas y demás enseres utilizados para batallar contra el calor, podría resultar aún más caro obtenerlas en el ambulante.

Y es que por un ventilador de pedestal de los llamados industriales en un supermercado se puede conseguir hasta en mil 500 pesos, con factura, garantía y con manual de operación e instalación incluido.

En cambio, el mismo producto de marca china en el mercado de los ambulantes lo puede encontrar hasta en mil pesos, pero sin garantía de por medio y sin documentos que amparen su buen funcionamiento.

Los “mini split” también se pueden conseguir en el mercado informal, con costos muy por debajo de los que se ofertan en en los negocios establecidos, pero tampoco garantizan su funcionamiento y la instalación corre por cuenta del comprador; no ofrecen asesoría.

Un “mini split” de un caballo de fuerza los pueden encontrar hasta en tres mil pesos, en tanto, en un local establecido el mismo modelo cuesta hasta cinco mil pesos, con la instalación por personal calificado incluida.

Menos ocupación hotelera

Por su parte, el dirigente local de la Canirac, Alvaro Mimenza Aguiar, destacó que las altas temperaturas dejan un aumento en las ventas de hasta 25 por ciento en restaurantes y negocios de alimentos y bebidas en la ciudad.

Explicó que los restaurantes en Yucatán durante abril, mayo, junio y julio tienen un trimestre que registra ventas a la alza, en comparación con los tres primeros meses del año.

El dirigente restaurantero detalló que en esta temporada de calor extremo, los comensales locales optan por asistir en mayor medida a los establecimientos de comida.

“Durante enero, febrero y marzo, el sector restaurantero viene de una verdadera cuesta, por lo que los meses de calor, como abril, mayo y junio, notamos un incremento de hasta un 25 por ciento”, comentó.

Mimenza Aguiar manifestó que los meses de calor son de los mejores del año para el sector restaurantero de la entidad.

“Incluso, es julio el que más entradas deja a los restauranteros de la entidad, en los últimos 10 años, ese mes representa uno de los tres que más derrama económica deja al sector”, apuntó.

En contraste, el vicepresidente de Turismo de la Canacome, Carol Kolozs Fischer, mencionó que para el sector turístico de Mérida la temporada de calor les deja baja ocupación.

Precisó que para los meses de más calor en la Península  se tiene una baja promedio de entre 35 y 50 por ciento en la ocupación hotelera de la ciudad capital.

Destacó que los visitantes extranjeros que llegan en estas fechas a la ciudad, prefieren ir a hoteles con perfil más rústico y estar más en contacto con la naturaleza, buscan refrescarse y alejarse del calor.