Agencias
MÉRIDA, Yuc.- La especialista en arquitectura y vivienda Patricia Méndez consideró inadecuado apostar por un sólo método general para construir complejos habitacionales, pues cada región de un país tiene sus propias características y necesidades.

Entrevistada por Notimex durante su visita a esta ciudad, dijo que siempre surgen debates sobre cómo deben ser los nuevos desarrollos habitacionales, y los recientes años algunos países apuestan por el “desarrollo vertical”, es decir, la construcción de edificios de departamentos de más de 40 metros de altura.

De hecho, en Yucatán y en otros puntos del país se ha hecho presente ese tipo de desarrollos habitacionales que responde también a nuevas políticas de subsidios oficiales al desarrollo de viviendas.

Con este tipo de edificaciones, anotó, se busca frenar el crecimiento horizontal, sobre todo en las grandes ciudades, donde cada día hay menos reserva territorial y dificultades para llevar los servicios básicos a los asentamientos humanos que van más allá de la periferia.

Sin embargo, para la especialista nacida en Argentina es importante tomar en cuenta que la construcción de grandes torres también demanda la instalación de elevadores, suministradores de agua, sistemas de ventilación y otros equipos que representan un vasto consumo de energía.

“Esto podría quitar la vocación ecológica y de sustentabilidad al proyecto de vivienda vertical, por lo que también habría que analizar si esa es la única y la mejor solución para las condiciones del lugar”, señaló.

Asimismo, refirió que otro factor que ha empezado a influir en el diseño de vivienda a nivel global son los avances tecnológicos.

“Antes, los televisores eran gigantes, por lo tanto necesitaban una espacio amplio para colocarlos, hoy los plasmas y LCD tienen el tamaño y grosor de un cuadro, por lo que incluso puedes ponerlos en una pared y lo mismo pasa con las cocinas, antes las estufas eran enormes y hoy los microondas cada vez son más compactos”, mencionó.

Un factor más es que “el área para socializar dejó de estar dentro de los hogares y se han llevado a las afueras, ya no se ocupan los grandes comedores y salas para departir en familia y se sugiere el uso de espacios públicos o fuera de la casa”, añadió.

Sin embargo, la especialista del Centro de Documentación de Arquitectura Latinoamericana aclaró que eso no quiere decir que las casas deban de construirse sólo por lo que marca la evolución tecnológica sino por la teoría del mejor aprovechamiento del espacio.

“No sólo hay que pensar pues en el tamaño del microondas sino en la persona que usará ese aparato, cómo darle la mayor movilidad y calidad de vida, generar un hábitat adecuado y tener un hogar con el espacio adecuado y lo necesario para una buena calidad de vida”, dijo.