Celestún, más que espantar atrae muchos visitantes

El puerto yucateco ofrece playa, gastronomía, ecoturismo y paisajes naturales únicos en el mundo.

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El paseo en la Ría es uno de los atractivos principales de Celestún. (Notimex)
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Agencias
MÉRIDA, Yuc.- Ecoturismo y paseos por los manglares, cuyos paisajes naturales envuelven a los visitantes, son parte de los atractivos de Celestún, donde se combina el agua dulce en su Ría Reserva de la Biósfera y la salada en su costa que forma parte del Golfo de México.

Ubicado a 109 kilómetros de la capital del estado de Yucatán, Mérida, este puerto de pescadores está ubicado en el extremo occidental de la Península de Yucatán.

Celestún que viene de los vocablos mayas, Celes que significa miedo o espanto y Tun que se traduce como piedra, se lee como Piedra de Espanto.

El lugar encierra mucho más que su nombre, porque ahí se puede practicar el ecoturismo y disfrutar de paseos por manglares, por la costa, ojo de agua, isla de pájaros y ver uno de los espectáculos naturales más coloridos como es al flamenco rosado en su hábitat natural.

A la entrada de la población yucateca se encuentra el Parador Ecoturístico donde está el embarcadero para que los visitantes puedan subir a las lanchas que cuentan con todos los dispositivos para un paseo seguro y placentero.

Humedales Ramsar

La Reserva de la Biósfera “Ría Celestún”, inscrita en la Convención de los Humedales, Ramsar, Irán 1971, es un sitio ubicado entre los municipios de Celestún y Maxcanú en el estado de Yucatán y Calkiní en estado de Campeche.

Se inscribió en la lista Ramsar el 2 de febrero de 2004 con el número 1333 porque cuenta con cuatro especies de manglar consideradas en alguna categoría de protección.

Además, cuenta con petenes, vegetación de duna costera, sabana y selva baja inundable en un excelente grado de conservación, además de ser hábitat crítico para una gran diversidad de especies.

El sitio tiene un área de 81 mil 482.33 hectáreas y sostiene una diversidad faunística en la que destacan 304 especies de aves residentes y migratorias; especialmente es un sitio de anidación, descanso, alimentación y reproducción del flamenco rosado.

Es una importante zona de anidación para la tortuga carey y se han encontrado juveniles de tortuga caguama. Las tres actividades productivas de la Reserva son la pesca, ecoturismo y extracción de sal.

El paseo que se ofrece a los turistas tiene una duración de hora y media y se permite que naden en el Manantial Baldiosfera y Cambay, así como en el ojo de agua, donde se puede incluso bucear.

El recorrido incluye la visita a la Isla de Pájaros, la vista de los flamencos rosados que llegan a este sitio de noviembre a marzo para alimentarse y reproducirse. Así como navegar por los túneles de mangle y el ojo de agua.

Los lancheros de Celestún están organizados en cooperativas, la mitad de ellos, aproximadamente unos 50 trabajan por el lado de la Ría y la otra mitad por el lado de la costa, aunque los paseos tienen el mismo destino.

Estas embarcaciones cuentan con todas las garantías de seguridad marítima, así como personal capacitado para ofrecer un paseo seguro, pues además cuentan con los permisos y seguros de vida y de gastos médicos correspondientes.

A un costado de la Ría, en un lugar que se conoce como Tambor, se reúnen los flamencos rosados a alimentarse y descansar, lo mismo que en la Reserva conocida como El Palmar, ubicada a 31 kilómetros de Celestún, donde se pueden observar grandes comunidades de este animal endémico.

En Celestún también existe la extracción de sal en el Rancho Real de Salinas, actividad que fortalece la economía de quienes habitan en ese puerto yucateco.

Otras especies que se pueden observar en la Reserva de la Biósfera Ría de Celestún son patos que emigran de Canadá y que permanecen de diciembre a marzo en tierras yucatecas, lo mismo que peces, pelícanos, garzas y albatros.

En ecosistemas de selva baja y sabana tropical este sitio alberga a 234 especies de mamíferos, entre los que destacan el ocelote, mono araña, tigrillo y jaguar, además de tortugas, lagartos y cocodrilos.

La pesca, que es otra actividad prioritaria para los habitantes de Celestún, tiene en especies como el mero, cazón, corvina, pámpano, pulpo y camarón sus manjares en la gastronomía que ofertan restaurantes ubicados a la orilla del mar y que atraen a turistas a disfrutarlos con bebidas locales.

Pesca, turismo y artesanías

Con una población de seis mil 831 habitantes, según dato del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) del censo de población de 2010, la mayoría se dedica al turismo, pesca y artesanías.

De acuerdo con el guía de turistas, Alberto Rodríguez Pisté, el puerto cuenta con cerca de 10 hoteles con todos los servicios, así como casas, departamentos y posadas de alquiler para todos los bolsillos, durante todo el año.

Las mujeres se dedican principalmente a la hechura de artesanías con productos de mar, con los que hacen collares, pulseras, lámparas, adornos para el hogar, llaveros y recuerdos, pero también adornos de madera con motivos de mar y especies como el flamenco rosado.

Rodríguez Pisté es uno de los promotores turísticos del puerto y la Ría, promociona los paseos y da información a los visitantes de la gama de servicios que en este lugar de Yucatán se ofrecen.

Las mejores épocas del año para los prestadores de servicios son las vacaciones de Semana Santa, los meses de verano y el fin de año, cuando Celestún reporta alta ocupación hotelera.

Con información de Notimex

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