Se 'desmoronan' joyas arquitectónicas e históricas de Yucatán

Investigadora de la Uady asegura que en los municipios existen edificios cuyo rescate cambiaría la imagen del lugar y atraería a visitantes.

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La casa del músico Ricardo Palmerín requirió trabajos de rehabilitación, está ubicada en Tekax. (Milenio Novedades)
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Ana Hernández/SIPSE
MÉRIDA, Yuc.- En los municipios existen edificios cuyo rescate cambiaría no sólo la imagen del lugar, sino que podría detonar proyectos de turismo para conocerlos, ya que cada uno trata de construcciones históricas con características que vale la pena preservar, señaló la investigadora y docente de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Autónoma de Yucatán (Uady), Marisol del Carmen Ordaz Tamayo.

La experta comentó que el municipio de Tekax tiene entre sus edificios históricos una casa de tres niveles, de los pocos inmuebles de ese tipo que se edificaron y existen en la entidad, pero por falta de mantenimiento se está desmoronando.

La entrevistada, quien también es asesora de Proyectos de la Comisión Diocesana de Arte Sacro, expresó que lamentablemente por falta de recursos y de conocimiento muchos edificios se transforman a paso acelerado.

En lo que se refiere a la Casa del Huay Cot, en Yaxcabá, dijo, no han podido localizar al propietario para obtener el permiso y que cuando menos les permita hacer un levantamiento completo del lugar con la intención de tener al menos un registro virtual, para que en un futuro, cuando existan el interés y los recursos, se pueda recuperar esa joya arquitectónica.

Mencionó que con el apoyo de estudiantes, incluso han diseñado propuestas de cómo luciría el edificio y la calle.

“Las personas no saben lo que tienen, hay mucho abandono y deterioro de la tipología arquitectónica; como no la valoran, la mutilan o transforman; hay muchos edificios majestuosos, pero con mucho deterioro”, explicó.

La investigadora comentó que Yaxcabá es otro municipio, lamentablemente de alta marginación, que tiene edificaciones religiosas o antiguos de gran valor. Ahí hay una iglesia de tres torres dedicada a San Francisco, es la única en el Estado de ese tipo. 

Consideró que hace falta más información y educación de los pobladores sobre el valor patrimonial que tienen los edificios donde viven, lo cual ayudaría a que los conserven, “y si tienen recursos,  tratar de invertirlos para mantenerlos, esto permitiría crear una cadena que propiciaría incluso desarrollo local”. 

Preocupante
  • La investigadora de la Uady comentó que otro punto que preocupa es que se pierde la información sobre la técnica original y de tradición en la construcción.
  • Mencionó que tienen conocimiento de algunos elementos, por las calas que se hacen en las construcciones, pero no hay registro.

Remodelaciones clandestinas afectan patrimonio cultural

Con el apoyo de reportes o de solicitudes, la delegación del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) trabaja para lograr la restauración de edificios, retablos, piezas arqueológicas e incluso imágenes en cuadros, generalmente de santos, que fueron pintados o tallados en madera o en muros de algunas iglesias desde hace varios siglos.

Este año la delegación en Yucatán ha recibido más de 120 reportes de trabajos de remodelaciones y adecuaciones a edificios históricos en Mérida y diversas partes del Estado, que se realizan sin la autorización correspondiente. 

La inspección de los trabajos ha derivado en la aplicación de cerca de 50 suspensiones de obra con algún procedimiento administrativo, de ese total, unas 20 están pendientes de resolver, el resto ya recibieron el permiso porque el proyecto se ajusta o fue adaptado a los lineamientos que estable la ley en la materia.

A finales de septiembre pasado, el reporte de vecinos llevó a la dependencia a actuar con rapidez, pues la fachada de un edificio histórico en el municipio de Temax, que tenía un marco de piedra labrada, fue “demolido” parcialmente para que pudieran meter una máquina de hilos.

Por “usos y costumbres”, las personas optaron por retirar y marcar las piezas del muro de piedra y demoler parte de la pared de mampostería, pero sin avisar al INAH, cuando el camión realizó las maniobras para meter el equipo, dio la impresión de que destruyó la fachada, por lo cual de inmediato el personal de la dependencia federal acudió a investigar.

Ante ello, el representante legal firmó un acuerdo para reconstruir la fachada como estaba en un plazo no mayor a quince días, el trabajo se hizo en menos tiempo y dado que las piezas de piedra que forman el marco de la entrada no estaban dañadas, supervisaron su colocación. 

El inmueble se ubica en la esquina de las calles 33 y 34, es la entrada del pueblo de Temax, al parecer data de la primera mitad del siglo XIX, el arquitecto Antonio Vega González en representación del Instituto fue el que se encargó de supervisar el cumplimiento de los trabajos.

Ante lo ocurrido la delegación emitió una amonestación administrativa y el dictamen de reconstrucción inmediata.. 

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