Cecilia Ricárdez/SIPSE
MÉRIDA, Yucatán.-  En la era tecnológica, para los millennials los gastos "hormiga" se diversifican, entre ellos incluyen el uso de aplicaciones móviles para tener acceso a música, series, películas; planes para más de un Smartphone, internet en el hogar y televisión de paga, que en conjunto al mes pueden superar el costo de servicios fundamentales como el agua y la electricidad.

Costo de luz y agua forman parte de quejas colectivas por la variación de sus tarifas; sin embargo, no sucede con el tema tecnológico, ya que se cubre el monto de forma puntual para no quedarse “desconectado” o perder el acceso al entretenimiento.

En este panorama, Ángel Sahagún Fernández, especialista de Tecnología Financiera (Fintech), recomienda a los millennians una reordenación de gastos para tomar en cuentan otros rubros, como el ahorro, seguros de vida, gastos médicos y hasta fondos para el retiro.

“No todo es tecnología, aunque la tendencia es que cada vez estemos más inmersos en el consumo de herramientas digitales y dispositivos tecnológicos. Es urgente que los usuarios tengan una planeación y control de sus gastos, y para eso también hay aplicaciones móviles, incluso gratuitas”, agregó el también fundador de Albo, App móvil del mercado Fintech y con funciones orientadas a la educación financiera.

Tomando en cuenta los datos de la Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares del Inegi y la oferta tecnológica a los que puede acceder un yucateco, se estima que una persona puede gastar en sus servicios (plan de celular, internet en casa, TV de paga y Apps para música y cine) más de mil pesos mensuales, que al año significan más de 12 mil pesos.

A esto se le agregan otros gastos hormiga como el café, cigarros y comidas en restaurantes, que impactan el presupuesto de manera negativa.

De acuerdo con lo que ha observado en sus procesos de investigación de mercado, Ángel Sahagún y su equipo señalan que el sector millennial (jóvenes entre los 22 y 35 años) son los mayores consumidores de aplicaciones móviles, tanto gratuitas como de paga, porque forman parte de su cotidianidad como trasferir dinero a través de su celular, comprar música y ver películas en línea, entre otros. En este contexto, apunta que el interés por la adquisición de las nuevas tecnologías va creciendo.