Celia Franco/Milenio Novedades
MÉRIDA, Yucatán.- El excesivo calor y el esfuerzo que realizaba Catarino R. R., de 53 años, lo llevaron ayer a la muerte mientras trabajaba como albañil. El alarife sufrió un infarto fulminante en la casa en la que trabajaba en un fraccionamiento en construcción.

El ahora occiso cumplía con su primer día de trabajo, pues recién llegó de su natal Coatzacoalcos, Veracruz.

Según información recabada en el lugar, el deceso ocurrió en un predio en construcción en la calle del Gorrión del fraccionamiento San Marcos.

De acuerdo con testigos, poco después de las 3 de la tarde, Catarino salió a buscar agua en un tambor que estaba fuera de la casa donde trabajaba y regresó para preparar mezcla, pero al momento de tomar una pala se desvaneció, cayó boca abajo y perdió la vida instantáneamente.

Los compañeros del trabajador y uno de sus sobrinos, al escuchar el ruido por la caída del cuerpo, se acercaron para ver qué sucedió.

Al lugar llegó la ambulancia 21-G de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), en donde paramédicos revisaron al albañil y aseguraron que uno de los motivos del infarto pudo ser el calor extremo al que estaba expuesto.

Los elementos constataron el fallecimiento del alarife y se dio aviso a las autoridades para las diligencias de rigor.

Identificó el cadáver Hermelindo H. J., de 63 años, tío del fallecido y también oriundo de Coatzacoalcos.

El Dato

• La causa del “golpe de calor” se produce por el exceso de exposición al sol, lo que produce dolor de cabeza, fatiga, calambres musculares, náuseas, elevación de la temperatura corporal y abundante sudoración.
• Si el paciente permanece mucho tiempo en este estado sin tomar las medidas oportunas, la piel aparece caliente y seca, se produce taquicardia (aceleración del pulso), adormecimiento y pérdida de conciencia, llevando al paciente a la muerte.

Muerto en Panabá

Por otro lado, luego de más de 24 horas extraviado fue encontrado sin vida el cuerpo de Benito R. C. Ch., 42 años de edad, quien era encargado del rancho “Álamo”, ubicado en el tramo Yalsihón-Panabá.

De acuerdo con la versión de sus familiares, Benito salió el domingo poco antes de las 11 de la mañana para arrear al ganado y traerlo al corral.

Al parecer en el trayecto se topó con un jabalí al que persiguió hasta cazarlo y cuando estaba de regreso cargando a su presa, sufrió un fulminante paro cardiaco.