Cecilia Ricárdez/Milenio Novedades
MÉRIDA, Yuc.- Ante los problemas en las relaciones interpersonales generados por el uso excesivo de dispositivos electrónicos, Joaquín Manuel Torres Aburto, presidente de la Asociación de Salud Mental Cetpa México IAP, urgió la implementación de la “Netiqueta”.

Se trata de generar reglas para el uso de internet y tecnologías de la información y comunicación (TIC), e integrarlas a la vida cotidiana en familia, parejas, grupos de amigos y centros de trabajo.

Para abonar al tema ofrecen conferencias y talleres, y preparan una campaña dirigida a las familias para fomentar la comunicación efectiva y significativa, en armonía con el uso de las TIC, pero con preferencia en el contacto personal presencial.

De acuerdo con indicadores del Instituto Nacional de Estadística Geografía e Informática (Inegi), en el rubro sobre disponibilidad y uso de tecnologías de la información, en Yucatán existen 80 líneas telefónicas de celular por cada 100 habitantes, y el 41 por ciento de la población es usuario de internet.

La necesidad de regular, en la medida de lo posible, el binomio humanos–uso de tecnologías ha generado un movimiento en el mundo en el que instituciones educativas y organizaciones civiles proponen reglas de convivencia.

Estas propuestas surgen desde los inicios de internet, y son una adaptación de las reglas de convivencia social al medio de comunicación electrónico, ya que la medida es la misma: la persona humana y su dignidad como tal.

Aunque el término no es común en la cotidianidad, su aplicación gana terreno desde casa hasta lugares públicos. En Yucatán, la organización Responsabilidad Digital promueve estas prácticas en sus conferencias y espacios en internet.

El psicoterapeuta y director de Cetpa México señaló que la organización trabaja con niños y adolescentes con problemas de conducta, así como con las familias, y han detectado que el uso excesivo de dispositivos electrónicos deriva en una adicción a las tecnologías, lo cual es prevenible y manejable cuando se establecen los márgenes de acción desde el hogar.

“Las tecnologías pueden ser provechosas si las sabemos usar, pero a algunos los ha cautivado tanto que no se quieren despegar”, indicó.

En esas situaciones se pierde el “nosotros”; en las propuestas para la campaña se plantea la necesidad de compartir al menos una comida diaria, “sabemos que es difícil, por los horarios, pero exhortamos a que se comprometan a que al menos una vez al día compartan la mesa y que haya una canasta donde pongan su celular y allí se queden para que disfruten el momento sin interrupciones”, detalló.

El especialista consideró que si no se realizan estas acciones la tecnología seguirá apartando a las familias, quebrando su cohesión y, por ende, la social.

Explicó que es necesario, para una mejor relación interpersonal, gozar de la presencia de los elementos de la familia, amigos, centro de trabajo y pareja, libre de tecnologías, al estilo de los espacios libres de humo, para que no se contamine la convivencia, ya que es importante estar “conectado”, pero es más significativa la relación presencial.

“La salud mental tiene que ver el equilibrio; por ejemplo, uno de los trastornos más fuertes es la esquizofrenia, ya que causa conflicto con la realidad”, indicó.

Mencionó que si las tecnologías sacan a las personas de alguna manera de la realidad se vive una especie de esquizofrenia tecnológica, ya que el mundo digital absorbe y no se atiende el presencial, el real.

En las relaciones personales, si no miran a las personas a los ojos cuando te hablan y usas tu celular, la otra parte siente que no le prestan atención.

En el tema de las adicciones, una droga es algo que no necesitas pero desarrollas dependencia, en este caso, en vez de sustancia es una conducta adictiva, y mientras a más temprana edad se presente se complica el proceso para lograr el equilibrio.