Cecilia Ricárdez/Milenio Novedades
MÉRIDA, Yucatán.- Cerró con éxito el VIII Tour de las Casas de Mérida; más de 800 personas descubrieron la belleza de las casonas del Centro Histórico de la capital yucateca gracias al evento anual de la Fundación Brazos Abiertos Yucatán (BAI), que promueve el valor de los edificios, los cuales son un botón de muestra del equilibrio entre la arquitectura y diseño moderno con el patrimonio histórico de los predios.

Ayer durante tres horas y media, los paseantes visitaron las sietes casas programadas en esta edición. Con mapa en mano  realizaron su recorrido a través de las diferentes zonas de los barrios de San Juan, Santiago, Santa Ana y Santa Lucía. 

Familias enteras, turistas nacionales  y extranjeros, así como una visible presencia de estudiantes de arquitectura, que son uno de los grupos más asiduos al evento cada año, porque durante la jornada tienen oportunidad de platicar con los arquitectos, diseñadores y propietarios de las casonas. 

De acuerdo con datos de la Fundación BAI, ocho de cada 10 participantes son mexicanos, a pesar de ser una actividad importada y en la que predominan los voluntarios extranjeros en la lista de casas que se abren cada año.

En esta ocasión destaca la presencia del primer yucateco que suma su casa al tour, se trata de Fernando Palomeque, quien reveló a los visitantes su buen gusto y amor por el diseño y la arquitectura.

La actividad es encabezada por Carlos Cabrera, director ejecutivo de la Fundación, apoyado por los miembros de comité de organización Rudy y Laney Ortega y Mark Callum.

Debido al éxito del evento, actualmente tienen una lista de espera de propietarios de casas que desean colaborar con la causa. La agrupacion se dedica a la educación, prevención, detección y atención del VIH/sida. 

Leanna Staines, una de las voluntarias que abrió su casa este año, comentó que tras visitar Mérida un par de días con su esposo, Russ Staines, se enamoró de la ciudad y decidieron que éste sería su nuevo hogar. Adquirieron la casa ubicada por el rumbo de San Juan y le dieron nueva vida con un estilo mexicano moderno, que armonizan con aspectos originales de la vivienda.

La pareja es de San Francisco, California, y con esta casa cumplieron su sueño de tener un predio espacioso, con jardín y la oportunidad de disfrutarlo con amigos y familiares.

Ellos viven en el lugar de tiempo completo y viajan cada año por un par de semanas a su tierra, porque a decir de Leanna, extraña Mérida cada vez que sale del país.