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MÉRIDA, Yuc.- Desnutrido y con las patas lastimadas, se encontró al caballo “Pitufo”, de apenas tres años y medio de edad, cerca de La Ermita. 

El animal, que era víctima de maltrato recurrente, cumplía jornadas agotadoras al arrastrar con dificultad su pesada carga -de más de 200 kilos- por varios kilómetros todos los días; además de recibir azotes por parte de su propietario, Isidro A. C., “tierrero” de oficio, para arrearlo.

Agentes de la Unidad de Protección Animal (UPA), de la Policía Municipal de Mérida, se encargaron del rescate del caballo.

El caso de “Pitufo”, como lo bautizaron los agentes, fue reportado de manera anónima a la jueza calificadora, Thelma Guadalupe Rivero Flores, quien de inmediato notificó a la Unidad de Protección Animal.

Enterados del hecho, a las 8:50 horas, los agentes policiales del Ayuntamiento de Mérida acudieron a la calle 77, entre 68 y 70, a unos pasos del parque de La Ermita, donde fue localizado el equino, que realizaba su habitual “jornada laboral”.

Durante el rescate animal, agentes de la UPA hallaron fue un caballo a simple vista desnutrido que cargaba el peso de una carreta y con aproximadamente 200 kilos de tierra para jardín, y al propietario.

Además, presentó laceraciones, así como heridas profundas en una pata, al parecer por una deficiente aplicación en los herrajes y que se pudo observar le causaban dolor al caminar.

El resultado de la revisión: existe la presunción de maltrato animal establecido en la ley.

Revisión

• La jueza explicó que el caballo quedó en disposición temporal para que se le haga una revisión completa y detallada de su estado de salud y anticipó que, con base en el reporte de los veterinarios del Centro Municipal de Control Animal, se determinará si se devuelve a su propietario o se le retiene definitivamente.