José Salazar
Este año en Yucatán la erisipela presenta un incremento del 20 por ciento con respecto a los casos que se registraron en 2017. 

Se trata de una enfermedad que puede presentarse en diversas partes del cuerpo y produce en la piel una placa de color rojo brillante, dolorosa y protuberante.

Los márgenes de dicha placa que produce la erisipela  tienen límites definidos y no se confunden con la piel normal circundante. La herida se siente caliente y firme al tacto, y aparece con mayor frecuencia en las piernas y en la cara.

Este mal es peligroso en algunos pacientes crónicos, como quienes padecen diabetes, pues pueden llegar a sufrir la amputación de la parte afectada al complicarse. 

De acuerdo con el Boletín  Epidemiológico de la Secretaría de Salud, correspondiente a la semana 46 (del 11 al 17 de noviembre), en el Estado se han confirmado 237 casos de erisipela, 132 en hombres y 105 mujeres. Al concluir 2017, el registro fue de 196 casos (114 hombres y 82 mujeres). 

La cifra también supera (en 35 por ciento) a la que se presentaba en la misma semana del año pasado, que era de 176 casos. 

El origen 

La erisipela generalmente es causada por las bacterias estreptococos del grupo A, que ingresan al organismo por medio de un corte en la piel, por problemas con el drenaje a través de las venas o el sistema linfático, o por llagas cutáneas (úlceras). 

Una forma muy común de contraer la infección es el pie de atleta (infección por hongos en los pies), ya que esto ocasiona descamación en el área de los dedos del pie, dando lugar a una pequeña entrada para muchas bacterias al organismo, incluyendo los estreptococos que causan la erisipela.