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TUCSON.- Esta semana un agente de patrulla fronteriza se declaró culpable de golpear a un migrante, sin embargo los hechos ocurrieron en 2014 y el agresor saldrá en libertad.

De acuerdo con Notimex, un agente de la patrulla fronteriza de Estados Unidos se declaró culpable de golpear repetidamente a un inmigrante que estaba esposado y tirado en el suelo, en un paraje cercano a la comunidad fronteriza de Nogales, Arizona.

El agente fronterizo Roy Ammerman enfrenta ahora una posible sentencia de cinco años de libertad condicional, tras declararse culpable esta semana de un cargo menor por la privación de derechos, de acuerdo con documentos presentados ante una Corte Federal en Tucson.

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El 30 de julio de 2014, Ammerman patrullaba cerca de Nogales con otro agente, cuando los operadores de las cámaras de vigilancia vieron a dos personas que cruzaban ilegalmente la frontera entre Estados Unidos y México, según documentos relacionados con el acuerdo de declaración de culpabilidad.

Una de las personas que cruzaron la frontera regresó corriendo a México. Un agente atrapó al otro hombre, que no fue identificado en documentos judiciales, al oeste de Nogales. El agente que arrestó al hombre sufrió una lesión en la pierna, que no fue causada por el inmigrante que arrestó.

El agente usó su radio para pedir ayuda. Cuando Ammerman llegó al sitio del arresto, otros tres agentes ya estaban allí. Ammerman salió de su patrulla, pasó corriendo junto al agente herido y se acercó a la víctima.

El inmigrante estaba esposado, "tumbado" boca abajo en el suelo y sin resistirse al arresto. Dos agentes estaban de pie junto a él, según el acuerdo de culpabilidad.

Ammerman golpeó a la víctima con el puño al menos seis veces en el lado derecho de la cabeza y la cara, por lo que los demás agentes intervinieron.

Ammerman luego golpeó a la víctima en su lado izquierdo. Un minuto después, lo golpeó nuevamente con el puño.

Ammerman se enroló en la patrulla fronteriza en 2006 y recibió capacitación y actualizaciones frecuentes sobre cómo hacer detenciones y usar la fuerza de forma legal, según el acuerdo de culpabilidad.

El agente aceptó renunciar a la patrulla fronteriza inmediatamente después de una audiencia de sentencia programada para el 16 de mayo próximo ante el juez federal Raner C. Collins. También se comprometió a no buscar empleo en ninguna corporación policial durante cinco años, según el acuerdo de culpabilidad.

La Patrulla Fronteriza colocó a Ammerman en suspensión indefinida sin pago el 12 de febrero de 2017.

El máximo castigo que enfrenta Ammerman es un año de prisión, un año de libertad condicional y una multa de 100 mil dólares, según el acuerdo de culpabilidad.