Critica el Papa a quienes regatean su fe en Dios

Francisco afirma que 'es muy difícil escuchar la voz de Dios, cuando uno gira en torno a sí mismo', a lo que llamó egoísmo.

|
El Papa Francisco durante la celebración de la misa por los obispos y cardenales fallecidos el año pasado, el lunes 3 de noviembre de 2014, en la Basílica de San Pedro. (Archivo/AP)
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Agencias
CIUDAD DEL VATICANO.- El Papa Francisco advirtió hoy contra los “católicos... pero no tanto”, que en realidad tienen miedo al pensar en el amor de Dios como algo gratis y cuya actitud “los empequeñece”.

Durante el sermón de su misa matutina privada, celebrada en la capilla de su residencia vaticana de Santa Marta, reflexionó sobre el pasaje bíblico que cuenta la fiesta organizada por un hombre y a la cual algunos invitados encuentran excusas para no ir.

Según dijo el líder católico, uno de los invitados pone como excusa que debe “mirar su campo” para sentirse “un poco poderoso”, cuando en realidad se deja llevar por la vanidad, el orgullo y el poder antes que permanecer sentado como tantos otros.

Otro hombre compró cinco bueyes, por lo tanto estaba concentrado en sus negocios y no quiso perder tiempo, mientras el último se disculpó diciendo que estaba casado y no quería llevar a la mujer a la fiesta.

“No, quería el afecto para sí mismo: el egoísmo. Al final, los tres tenían una preferencia por sí mismos, no querían compartir una fiesta: no saben lo que es una fiesta. Siempre existe el interés, lo que Jesús calificó como el contracambio”, indicó.

“Si la invitación hubiese sido, por ejemplo: Vengan que tengo dos o tres amigos negociantes que vienen de otro pueblo, podemos hacer algo juntos, seguramente ninguno se habría disculpado. Pero lo que les atemoriza es que sea gratis”, añadió.

Advirtió que, a final de cuentas, el egoísmo “está en el centro de todo” pero constató que “es muy difícil escuchar la voz de Dios, cuando uno gira en torno a sí mismo: no tiene horizonte, porque el horizonte es él mismo”.

Sostuvo que los seres humanos están más seguros en sus pecados, en sus límites donde “se sienten como en casa”. “¿Salir de nuestra casa, ir a la invitación de Dios, a su casa, con los demás? No. Tengo miedo. Todos los cristianos tenemos este miedo dentro”, insistió.

“Somos católicos pero no tanto, confiados en el señor pero no tanto. Este ‘pero no tanto’ marca nuestra vida, nos hace pequeños, ¿no? Nos empequeñece”, apuntó.

Lo más leído

skeleton





skeleton