Washington.- Los demócratas presentaron el lunes un proyecto de ley en la cámara baja del Congreso para fortalecer las protecciones de los pacientes inscritos al programa de salud conocido como Obamacare con la idea de agudizar la respuesta al coronavirus y convertir la ley en una potente arma en año electoral.

El proyecto de la Cámara de Representantes parece avanzar en líneas partidistas y no tiene ninguna posibilidad de ser aprobada en el Senado, donde los republicanos son mayoría. La Casa Blanca ya amenazó con vetarla. Sin embargo, el debate pone en evidencia que la atención médica se perfila como un importante campo de batalla en las elecciones de este año.

La iniciativa busca aumentar los subsidios que reciben las personas de bajos ingresos para pagar la cobertura. Reduciría los pagos federales a los estados que no expanden la cobertura de Medicaid — el programa gubernamental de asistencia médica para pobres o discapacitados— a más estadounidenses y permite que Medicare —enfocado en ancianos— negocie precios más bajos de medicamentos con las compañías farmacéuticas.

La ley médica fue promulgada en 2010 por el entonces presidente Barack Obama y pide a las aseguradoras cubrir a beneficiarios con afecciones médicas preexistentes e incluir a dependientes de hasta 26 años en las pólizas de los padres.

El debate se produce en plena pandemia y mientras el gobierno de Donald Trump busca que la Corte Suprema declare inconstitucional todo el estatuto.

Trump no tendrá que vetar la medida porque nunca llegará a sus manos, pero la Casa Blanca expresó sus objeciones de todos modos con una amenaza de veto. Un comunicado enviado a los legisladores dice que el proyecto de ley recurre “al mismo enfoque costoso, ineficiente y burocrático para la cobertura de salud” y considera que la propuesta es “equivocada y contrarresta las necesidades más urgentes del país”.

El congresista republicano de Greg Walden, de Oregon, dijo que la medida demócrata es “vengativa y probablemente inconstitucional”.

La Casa Blanca presentó documentos ante la Corte Suprema la semana pasada apoyando un esfuerzo de los estados liderados por el Partido Republicano para que todo Obamacare sea declarado inconstitucional.