Agencias
MOSCÚ, Rusia.- Las autoridades rusas anunciaron hoy que dos mil extranjeros fueron llevados a las estaciones de la policía para verificar su condición migratoria en el marco de una campaña contra la inmigración indocumentada, según publica Notimex.

La policía verificó el estatus legal de los dos mil extranjeros, luego de las redadas realizadas la noche del miércoles, señaló un portavoz del Ministerio del Interior a la agencia rusa de noticias Interfax.

De acuerdo con el vocero se impusieron sanciones administrativas a más de 140 extranjeros, que violaron las leyes migratorias.

El servicio de prensa del Ministerio del Interior informó anteriormente que 150 trabajadores migrantes que viven en dos edificios en el distrito Biryulyovo en el sur de Moscú habían sido trasladado a las estaciones de la policía.

El distrito Biryulyovo en el sur de Moscú, donde residen miles de migrantes, fue el escenario de los disturbios xenófobos del pasado 13 de octubre en respuesta al asesinato de un joven moscovita.

El lunes anterior fueron detenidas mil 200 personas en el mercado de Biryulyovo, regentado por comerciantes provenientes del Cáucaso y Asia Central, para verificar sus papeles y comprobar su posible implicación en la muerte de Yegor Sherbakov.

La policía detuvo el martes a Orhan S., originario de la república sur caucásica de Azerbaiyán, sospechoso del crimen del joven eslavo que desató los disturbios xenófobos del pasado domingo.

Desde que el pasado 27 de julio un policía fue brutalmente atacado en un mercado moscovita por los parientes de un joven daguestaní acusado de intentar violar a una menor, el Ministerio del Interior lanzó la mayor campaña contra la inmigración ilegal.

En agosto pasado fueron detenidos en la capital rusa cuatro mil extranjeros en distintos mercados de abasto. Muchos de ellos fueron puestos a disposición judicial, y otros fueron deportados a sus países de origen.

Tres cuartas partes de los rusos ven con malos ojos a los inmigrantes y se manifiestan a favor de endurecer las leyes que regulan la entrada de la mano de obra extranjera en el país.

Los ánimos contra los inmigrantes ilegales, sobre todo los que proceden de los países de Asia Central (Tayikistán, Uzbekistán y Kirguizistán), son especialmente fuertes en Moscú, donde viven según algunas estimaciones hasta 2.5 millones de extranjeros.