Detienen a nueve sospechosos del ataque en Túnez

Ante el atentado, el gobierno convocó a una reunión especial de Seguridad para implantar nuevas medidas que blinden el país.

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Policías vigilan el acceso al depósito de cadáveres del hospital Charles Nicole en Túnez. (EFE)
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EFE
TÚNEZ.- La Policía tunecina avanzó este jueves en la investigación para desmantelar la célula yihadista que el miércoles mató a 18 turistas extranjeros en un atentado que ya ha sido reivindicado por el grupo terrorista Estado Islámico (EI).

La indignación por lo sucedido y por el objetivo elegido por los terroristas -la industria turística, clave para la estabilidad democrática y la recuperación económica del país- se mezclaba hoy con un sentimiento de pesimismo en la capital tunecina.

"¿Cómo es posible que haya sucedido algo así? ¿Por qué no se puso más vigilancia?", se preguntaba Munira, una joven de 27 años que como cientos de tunecinos se acercaron al lugar de los hechos para mostrar su solidaridad con las víctimas y expresar su repulsa al terrorismo.

"Había muchas señales. Atentados semanas atrás y numerosas detenciones", criticaba por su parte un periodista local que prefirió no ser identificado.

Pese a la reivindicación difundida a través de una grabación de audio, las autoridades tunecinas mantienen abierta una investigación de la que se filtran pocos datos.

Fuentes de Seguridad confirmaron a Efe que se han practicado nueve detenciones y que se interroga a cuatro personas por su presunta participación en los hechos y a otras cinco por haber dado apoyo y cobertura a la célula.

Los agentes no descartan que los terroristas tuvieran apoyo logístico del grupo yihadista local Ansar al Sharia, que tiene sus bastión en la región de Kasserin, una zona abrupta y montañosa pegada a la frontera con Argelia.

Allí, a mediados del pasado mes de febrero, un grupo de terroristas abrió fuego contra un puesto de control de la Guardia Nacional y mató a cuatro agentes.

Desde entonces, la Policía y el Ejército tienen abierta una gran operación para capturar a los autores y controlar un territorio de unos cien kilómetros cuadrados de exclusión militar donde se concentran yihadistas provenientes de varios países del Sahel.

El mismo miércoles, el padre de uno de los presuntos terroristas abatidos explicó que desconocía el paradero de su hijo y que creía que había viajado a Irak y Siria para sumarse al combate del autodenominado Estado Islámico.

El ataque se inició el miércoles cuando un joven de unos 20 años disparó una ráfaga de metralleta contra un grupo de turistas hispanohablantes 

Ante esta situación, el gobierno convocó hoy una reunión especial de Seguridad para implantar nuevas medidas que blinden el país y eviten los efectos nocivos del islamismo radical, principal amenaza para la nación que mejor ha sabido salir de las denominadas primaveras árabes.

Túnez es el país que más yihadistas ha exportado a Siria e Irak, unos tres mil voluntarios según fuentes de la lucha antiterrorista, y su regreso al país es una de las principales preocupaciones del recién estrenado primer gobierno posterior a la transición.

Mientras la investigación avanza, los expertos forenses tratan de identificar los cadáveres de los turistas muertos.

Fuentes médicas indicaron a Efe que ya se conoce la identidad de doce de los turistas de media docena de nacionalidades que murieron en el ataque, entre ellos la de dos ciudadanos de Colombia y dos jubilados españoles.

Los hijos de estos últimos llegaron hoy a Túnez y ya confirmaron la muerte de sus progenitores, que se encontraban disfrutando de un crucero por el Mediterráneo regalo de su familia para celebrar sus bodas de oro.

Uno de los hijos dijo hoy a Efe, al salir de la identificación, sentir "mucho dolor" por lo sucedido, antes de agradecer el trato y las gestiones de la embajada y del Gobierno español, que ha enviado un avión a Túnez para acelerar la repatriación de los cadáveres.

En ese aparato también viajarán con toda probabilidad Cristina Rubio y Juan Carlos Sánchez, una pareja de Valencia (España) protagonista de la buena noticia del día.

Ambos estaban desaparecidos desde el momento del ataque y pasaron 24 horas escondidos hasta que esta mañana cuando fueron hallados en una de las estancias del museo por agentes de seguridad, según adelantó Efe.

Ninguno de los dos estaba herido, pero ambos fueron trasladados a un hospital para una evaluación médica rutinaria, ya que la joven se encuentra embarazada de cuatro meses.

En estado aún de "shock", ninguno de los dos quiso atender a la prensa española, antes de abandonar el centro hospitalario.

El ataque se inició el miércoles cuando un joven de unos 20 años disparó una ráfaga de metralleta contra un grupo de turistas hispanohablantes que se disponían a visitar el Museo del Bardo, aledaño al Parlamento y uno de los más importantes de Túnez.

A consecuencia de esos disparos murieron siete personas, entre ellas los dos ciudadanos españoles, antes de que los terroristas tomaran una treintena de rehenes y se atrincheran en el jardín del museo.

En la operación policial posterior de rescate murieron otras 16 personas, incluidos un agente del orden, una empleada del museo y los terroristas, que habían intentado entrar, sin éxito, en el edificio del Parlamento. 

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