Agencias
DALLAS, Texas.- Donald Trump volvió a utilizar su verborragia para disparar contra los inmigrantes y criticó que Estados Unidos se haya convertido en el "basurero del mundo". "Están en todos lados", afirmó durante un discurso en Dallas en referencia a los extranjeros que llegan al país.

Con frases altisonantes, como es su costumbre, el precandidato presidencial republicano volvió a arengar a favor del odio a los inmigrantes, en especial a los ilegales y a los latinos, frente a los miles de seguidores que lo escucharon en un estadio de Dallas.

También con críticas a los demócratas y a los republicanos que lo cuestionan, Trump -quien se prepara para el segundo debate antes de la interna de su partido- prometió un fuerte liderazgo y celebró la buena marcha de su campaña hasta el momento, según publicó RT con datos de la versión en línea de 'The Washington Post'. Aunque, como es costumbre, careció de detalles políticos.

Sin embargo, no todos los presentes alentaron las posturas extremas del magnate, ya que, además, atrajo hasta el estadio a centenares de personas con pancartas de repudio, bajo el grito: "¿Qué queremos? ¡Hacer caer a Trump!".

Ventas locas

Algunos solo se acercaron porque no querían perderse la altisonancia del republicano. Según el portal, hubo asistentes que manifestaron que no estaban seguros de votar a Trump pero no querían dejar pasar la oportunidad de verlo en persona. 

Otros simplemente aprovecharon la presencia de la multitud para hacer sus propios negocios. Con la leyenda 'Hacer a América [Estados Unidos] grande otra vez', la venta de gorras, viseras, camisetas y todo tipo de productos se disparó en las gradas.

Mientras tanto, Trump seguía con su retórica agresiva en el escenario, apuntando a todo tipo de enemigos, entre inmigrantes, políticos, periodistas y todo aquel que se cruzara en su camino hacia su sueño de ocupar el sillón principal de la Casa Blanca.