El Papa asegura que evangelio no se anuncia con cara 'fúnebre'

Francisco dijo que "nosotros cristianos no estamos tan acostumbrados a hablar de felicidad, de alegría"

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El Papa dijo que Dios "se alaba saliendo de sí mismos". (Agencias)
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Agencias
CIUDAD DEL VATICANO.- La alegría cristiana nace también "perdiendo tiempo en alabar a Dios", y no se anuncia el Evangelio con las caras tristes y "fúnebres", dijo hoy el papa Francisco en la misa en la Casa de Santa Marta.

Participaron hoy en la misa, cuya homilía fue publicada por Radio Vaticana, algunos empleados de los Servicios Económicos del Vaticano y algunos colaboradores de la Guardia Suiza, según publica el sitio web ansa.it.

Como siempre, Francisco partió de las lecturas del día, un fragmento del profeta Sofonías que dice: "Alégrate, grita de felicidad, el Señor está en medio de ti", y el relato de Isabel y su hijo que "exulta de felicidad" en el vientre al oír la palabra de María. 

"Nosotros cristianos -comentó el pontífice- no estamos tan acostumbrados a hablar de felicidad, de alegría", "creo que muchas veces nos gustan más las quejas".

Y en cambio "es precisamente el Espíritu quien nos guía: El es el autor de la felicidad, el Creador de la alegría. Y esta alegría en el Espíritu nos da la verdadera libertad cristiana. Sin alegría, nosotros cristianos no podemos volvernos libres, nos volvemos esclavos de nuestras tristezas".

"El gran Paulo VI -recordó- decía que no se puede llevar adelante el Evangelio con cristianos tristes, desconfiados, desalentados. No se puede. Esta actitud un poco fúnebre... muchas veces los cristianos tienen más cara de ir a un cortejo fúnebre que de ir a alabar a Dios, ¿no? Y de esta alegría viene la alabanza".

El Papa dijo que Dios "se alaba saliendo de sí mismos", "gratuitamente", e invitó a "perder tiempo alabando a Dios".

"Si no alabas a Dios -sugirió- no sabes de esa gratuidad de perder tiempo alabando a Dios, es larga la Misa". "La eternidad -subrayó- será eso: alabar a Dios. Y no será aburrido: será bellísimo. Esta felicidad nos hace libres".

Luego, el papa Francisco indicó a la Virgen como modelo de esta actitud de alabanza, tanto para la Iglesia como para los cristianos. 

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