Agencias
BUENOS AIRES, Argentina.- El documental Francisco de Buenos Aires, una coproducción argentino-italiana en pleno rodaje, se estrenará el 13 de marzo en comunidades de pobreza extrema en Argentina —conocidas como villas miserias o favelas—, al cumplirse un año de Papado, y luego será llevado a los cines del país, contó su director.

“La filmación está muy avanzada. La película va a tener un preestreno en villas miserias y hospitales de Buenos Aires, porque los documentales tienen que ser fieles al protagonista de la biografía, conceptual y estéticamente”, explicó el cineasta argentino Miguel Rodríguez Arias, pública Milenio.

Este publicista y documentalista, que comenzó a plasmar el proyecto apenas Jorge Bergoglio llegó al Vaticano, cuenta con un archivo enorme construido desde 1983 con 50 mil horas de grabaciones sobre Francisco, entre las cuales encontró homilías clave de la última década cuando el ahora pontífice era cardenal primado de Argentina.

“Empecé a investigar en marzo, poco después del nombramiento de Francisco. Me dio mucha curiosidad tratar de entender por qué el Vaticano había dado ese golpe de timón y designaba por primera vez un Papa latinoamericano, por primera vez un jesuita”, recordó el autor de otros documentales, entre ellos uno sobre la vida del cantor de tangos Carlos Gardel y otro sobre el ídolo deportivo Diego Maradona.

Recorrido

Esta biografía sobre el Papa, concebida en formato cinematográfico, hace un recorrido por su vida, que comienza en la casa de la infancia y está basada en un largo testimonio de su hermana María Elena Bergoglio.

Por ahora la producción no ha previsto un testimonio directo de Francisco, pero el trabajo aborda temas que van desde su pasión por el futbol y el club San Lorenzo, pasando por su deleite por la música y la literatura y su amistad con el escritor Jorge Luis Borges.

No elude cuestiones más polémicas como el rol del jesuita Bergoglio durante la dictadura argentina (1976/83) ni su militancia en el peronismo, el principal movimiento político desde la segunda mitad del siglo XX en Argentina.

Toca también temas como la coherencia del pontífice en cuanto a predicar una vida austera, el estilo de liderazgo y su esfuerzo en el diálogo interreligioso, a través del relato de los rabinos Abraham Skorka y Daniel Goldman, y el dirigente musulmán Omar Abboud.

El mítico grupo argentino de rock Vox Dei (Voz de Dios, en latín), que en los años 60 editó el disco La Biblia, será el encargado de la musicalización del documental sobre Jorge Mario Bergoglio. El rodaje de este trabajo es financiado con fondos italianos además de contar con el apoyo del ministerio de los Bienes y la Actividad Cultural de Italia.

Miguel Rodríguez Arias obtuvo en 1997 el Premio Iberoamericano Rey de España por Las patas de la mentira, un filme de recopilación documental de discursos políticos que pone a la luz los fallidos inconscientes de decenas de funcionarios argentinos en la década de los 90.

Cardenales

Por su parte, a un día de haber nombrado a los 19 cardenales, Francisco señaló en una breve misiva divulgada este lunes por el Vaticano que recibir ese título “no representa una promoción ni una condecoración”.

En una carta enviada a los elegidos, el pontífice argentino dijo a los purpurados: “Deseo que me puedan ayudar con eficaz fraternidad en mi servicio a la Iglesia universal”.

Aunque el Papa comprende la “alegría” de los seleccionados, advierte en la misiva que han sido llamados a evitar todo acto “mundano” y mantener un estilo “austero y sobrio”, que respete el voto de pobreza.

La mayoría de los elegidos, que recibirán el título el 22 de febrero durante una ceremonia en el Vaticano, se enteraron por los medios de comunicación del nombramiento, ya que Francisco al parecer mantuvo la lista en secreto y no los consultó, lo que sorprendió tanto a los elegidos como a varios funcionarios del Vaticano.

Al designar cinco latinoamericanos, tres africanos y dos asiáticos, Francisco privilegió a religiosos del sur del planeta, que cumplen su trabajo pastoral en “las periferias geográficas, humanas y espirituales”, que “huelen a cordero”, como suele pedir el papa a los curas, principios claves que ha repetido en varias ocasiones durante su pontificado.