EU y la encrucijada de juzgar a menores de edad

Un niño que en 2009 mató a su padre irá a juicio el próximo 26 de agosto y podría quedar preso hasta que cumpla 21 años.

|
Los expertos dicen que el acusado, que ahora tiene 14 años, es apenas uno de un puñado de niños muy chicos en la historia de la nación que enfrenta ese cargo. (elimparcial.com)
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Agencias
ALBUQUERQUE, Nuevo México.- Según el abogado de un niño de 10 años que mató de un disparo a su padre en Nuevo México, el menor vivía en un hogar agresivo, en una vivienda inmunda y había tratado desesperadamente de conseguir ayuda para poner fin a las golpizas que él y sus hermanitos menores habían recibido durante años de su progenitor.

Un día de 2009, dice la fiscalía, el niño encañonó una pistola en la cabeza de su padre —un hombre de 113 kilogramos (250 libras)— y lo mató en su casa en Belen, Nuevo México.

Después de años de un proceso intermitente, el niño enfrentará un jurado este mes por asesinato en primer grado en un caso inusual que reavivará el debate de si los niños tan pequeños son capaces de la premeditación que exige un cargo tan severo. Los expertos dicen que el acusado, que ahora tiene 14 años y vive en Oklahoma, es apenas uno de un puñado de niños muy chicos en la historia de la nación que enfrenta ese cargo.

Solamente 13 estados tienen una edad mínima en la que los niños pueden ser juzgados o adjudicados a un tribunal de menores

"He estado practicando derecho durante 20 años y este es el caso más triste que haya visto", comentó el defensor, William Cooley. "No sé ni siquiera por qué este caso va al tribunal".

El fiscal Lemuel Martínez se negó a hablar sobre el caso con The Associated Press, pero justificó la decisión de caratular el caso como asesinato en primer grado. "Vamos al tribunal porque creemos tener pruebas suficientes", afirmó.

El caso debe ir a juicio el 26 de agosto en un tribunal del condado de Valencia, pero la defensa desea un cambio de escenario y busca que no se tenga en cuenta el llamado que hizo el niño al teléfono de emergencia policial, 911. Sus abogados dicen que el padre, Byron Hilburn, de 42 años, tenía fuertes vínculos con los miembros de los organismos disciplinarios en la zona y que eso podría prejuiciar a posibles jurados. Quieren que el caso se traslade al condado Sandoval, al norte de Albuquerque.

The Associated Press no da el nombre del niño porque es juzgado como menor en un tribunal de menores.

De ser hallado culpable, el acusado quedaría en custodia del estado hasta cumplir 21 años y debe participar en un plan de rehabilitación.

Solamente 13 estados tienen una edad mínima en la que los niños pueden ser juzgados o adjudicados a un tribunal de menores, según el Centro Nacional de Defensa de Menores. En ocho de esos estados, la edad es de 10 años. Nuevo México no tiene ninguna ley semejante.

En el caso del niño de Nuevo México, los fiscales optaron por no juzgarlo como adulto.

El abogado defensor dijo que planea citar a más de tres decenas de testigos para atestiguar en nombre del niño sobre el abuso a que dice era sometido y a la falta de intervención del estado. Aseguró que demostrará que el niño no estaba totalmente consciente de sus acciones el día del incidente y que era sometido a una violencia constante. El padre también mantenía pistolas cargadas en la casa, agregó.

Lo más leído

skeleton





skeleton