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BEIJING.- El número de muertos por el virus H7N9 de gripe aviar en China llegó hoy a un total de 162, con el reporte de una nueva víctima y cinco nuevos casos en la central provincia de Human, donde cerca de 30 mil aves de corral están infectadas.

El Centro de Control y Prevención de Enfermedades de Hunan informó este domingo que entre el 24 y el 30 de marzo fueron detectados seis nuevos casos de contagio del virus H7N9, entre ellos una persona que falleció.

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En un comunicado, la dependencia destacó que el clima frío y lluvioso que varias regiones de la provincia han experimentado en las últimas semanas, ha contribuido a la propagación del virus, según un reporte de la agencia estatal de noticias Xinhua.

El repunte de los casos, el más significativo desde octubre pasado, cuando inició el brote actual, ocurre pese a la prohibición total de la venta y traslado se las aves de corral vivas impuesta en días pasados por las autoridades, destacó el reporte de la agencia china.

El número de infecciones humanas de esta temporada ha crecido en el nivel más alto desde 2009, con al menos 162 muertes desde octubre, destacó.

Entre el 24 de febrero y el 7 de marzo pasado, las autoridades chinas se notificaron a la Organización Mundial de la Salud (OMS) 58 nuevos casos confirmados de infección humana de la cepa H7N9 del virus de gripe aviar, que infectó por primera vez a un ser humano en China en marzo de 2013.

De acuerdo con cifras oficiales, al menos 29 mil 760 aves de corral en la provincia de Hunan estaban infectadas con el virus de la gripe aviar durante el recién concluido mes de marzo, por los que más 170 mil fueron sacrificadas como resultado.

Sacrificio de más de 170 mil aves

El último brote de gripe aviar en China, registrado entre fines de 2013 y principios de 2014, provocó la muerte de 36 personas y causó pérdidas por más de seis mil millones dólares en el sector avícola.

Desde octubre pasado, el gigante asiático ha sacrificado más de 170 mil aves de corral en cuatro provincias y cerrado varios mercados donde se comercializan aves vivas, después de que se reportaron las primeras infecciones de aves con H5N6, otra cepa altamente patógena del virus.

La cepa H7N9 es altamente patógena en humanos, causante de una enfermedad respiratoria severa, aunque no es virulenta entre las aves, lo que hace casi imposible que pueda ser detectada por los criadores y comerciantes de aves de corral.