Irán manifestó este domingo su disposición a considerar conversaciones con Estados Unidos, aunque dejó en claro que solo se enfocarán en los temores occidentales sobre la posible militarización de su programa nuclear.

A través de un comunicado difundido en su cuenta oficial en X, la misión iraní ante Naciones Unidas señaló:

“Si el objetivo de las negociaciones es abordar las preocupaciones respecto a cualquier posible militarización del programa nuclear de Irán, tales discusiones podrían ser objeto de consideración”.

Este mensaje contrasta con la postura que, apenas un día antes, expresó el líder supremo de Irán, Alí Jamenei, quien rechazó cualquier diálogo con Washington.

Jamenei argumentó que las negociaciones estarían destinadas a limitar el programa de misiles iraní y su influencia en Medio Oriente. Además, afirmó que las propuestas estadounidenses no resolverían las diferencias fundamentales entre Teherán y Occidente.

El giro diplomático de Irán se produce luego de que el presidente Donald Trump confirmara haber enviado una carta a Jamenei. En ella, propuso un nuevo pacto que sustituya al acuerdo nuclear de 2015, del cual Estados Unidos se retiró durante su primer mandato.

La intención de Trump es lograr un compromiso que detenga el programa nuclear iraní, en un contexto donde Washington e Israel han advertido que no permitirán que Irán desarrolle armas atómicas.

Aunque Teherán insiste en que su programa tiene fines civiles, la comunidad internacional observa con preocupación el incremento en el enriquecimiento de uranio, cercano a niveles militares. A esto se suman las tensiones con Israel y la inestabilidad regional, en particular en la Franja de Gaza.

En su declaración, la misión iraní fue enfática:

“Si el objetivo es el desmantelamiento del programa nuclear pacífico de Irán para afirmar que lo que Obama no logró ahora se ha conseguido, tales negociaciones nunca tendrán lugar”.

(Con información de The Associated Press)