Agencias
TEHERÁN, Irán.- El presidente de Irán anunció otro posible beneficio del acuerdo nuclear alcanzado con las potencias mundiales: su país podría comprar pronto los aviones que tanto necesita para renovar su anticuada flota.

Los negociadores iraníes salieron de las conversaciones en Viena con "logros más allá de lo nuclear" y tras lograr la "retirada de las sanciones a la aviación", dijo Hasan Ruhani.

Sus declaraciones fueron recogidas por la agencia oficial de noticias IRNA el miércoles por la noche, publica The Associated Press.

La intención del acuerdo celebrado el martes entre Irán y seis potencias luego de largas negociaciones en la capital austríaca es impedir que Teherán adquiera la capacidad de fabricar armas nucleares, a cambio del levantamiento parcial de sanciones. Según el acuerdo, las sanciones más fuertes -como las que pesan sobre los sectores financiero y energético- se levantarán cuando Irán ejecute las restricciones a su programa nuclear.

Las sanciones internacionales han prohibido la venta de aviones occidentales y algunos repuestos a Irán, haciendo imposible que Teherán compre nuevos aviones y complicando el mantenimiento de los modelos Boeing y Airbus que utiliza.

La última vez que Irán adquirió un avión nuevo de una empresa occidental fue a principios de la década de 1990, en una compra al fabricante holandés Fokker que luego quebró.

Ruhani no entró en detalles más allá del levantamiento de las "sanciones a la aviación", pero el ministro de Transportes Abas Ajundi dijo que ha habido conversaciones con Boeing y Airbus y que habrá acuerdos iniciales en pocos meses.

"Proveeremos nuevos aviones a Irán", dijo Ajundi.

El mes pasado en la Exhibición Aérea de París, Ajundi dijo que Irán podía gastar unos 20,000 millones de dólares en 400 aviones nuevos durante la próxima década.

Bajo el régimen de sanciones, Irán trató de soslayar las medidas mediante la compra de aviones civiles a terceras empresas y logró mantener su aerolínea de bandera Iran Air y otras mediante la renta de aviones.

En mayo, el Tesoro estadounidense dijo que tomaba medidas punitorias contra una compañía iraquí y una de los Emiratos Árabes Unidos que ayudó a Irán a comprar aviones de segunda mano. Teherán había anunciado previamente la adquisición de aviones más nuevos para su aviación civil.

Sin embargo, en 2013 permitió a Boeing y General Electric vender algunos repuestos para motores de aviones estadounidenses que estaban en servicio en Irán desde la década de 1970.