Agencias
WASHINGTON, DC.- La funcionaria del Servicio de Rentas Internas que preside el grupo de exenciones fiscales, Lois Lerner, dijo el miércoles que no hizo nada indebido con los grupos conservadores e invocó su derecho a no declarar bajo la Quinta Enmienda de la Constitución ante la Comisión Supervisora y de Reformas Gubernamentales de la Cámara de Representantes.

Lerner defendió su integridad profesional durante su brevísima comparecencia ante la comisión, que investiga si el IRS (siglas en inglés del organismo) acosó e intimidó a grupos conservadores como el Tea Party y otros que habían solicitado exenciones fiscales ante las elecciones del 2010 y el 2012 durante la dirección de Lerner en ese departamento, según publica The Associated Press.

"Nada indebido hice", dijo Lerner con un rostro adusto al comparecer con otros tres testigos durante la lectura de su breve declaración. "No violé ley alguna. No violé norma o regulación alguna del IRS y no facilité información falsa a esta o a cualquier otra comisión".

Los miembros del Congreso se quejaron airadamente que Lerner y otros altos funcionarios del IRS no informaron a los legisladores que los grupos conservadores fueron sometidos a examines especiales, pese a que los legisladores plantearan al IRS en múltiples ocasiones el tema después que grupos locales del Tea Party se quejaran de recibir un trato injusto.

Los miembros del Congreso se quejaron airadamente que Lerner y otros altos funcionarios del IRS

Lerner invocó su derecho a no declarar bajo la Quinta Enmienda de la Constitución para evitar incriminarse después que el presidente de la Comisión Supervisora y de Reformas Gubernamentales de la Cámara de Representantes, el republicano Darrell Issa, le pidió que reconsiderara su posición. Lerner respondió que "no responderé a pregunta alguna o declararé sobre el tema en la reunión de este comité".

Nueve minutos después de comenzar su oratoria, Issa excusó la presencia de Lerner, que abandonó el salón por una puerta trasera, escoltada por su abogado y otros hombres, que la metieron rápidamente en un ascensor y varios de ellos empujaron físicamente a los camarógrafos que intentaron filmarla.

El abogado de Lerner, William W. Taylor, pidió que fuera excusada de comparecer el miércoles, ya que su presencia "no tendría otro objetivo que avergonzarla o acosarla". Empero, la comisión tiene poderes de requisitoria judicial para obligarle a que lo haga.

Lerner desató el escándalo sobre las presiones del IRS solamente a grupos conservadores en una conferencia de abogados hace dos semanas, cuando reconoció, ante una pregunta que había sido arreglada por el organismos fiscal, que el Tea Party y otros grupos de derecha que solicitaron exenciones fiscales fueron sometidos a unos exámenes mucho más rigurosos y a extensas dilaciones en las elecciones del 2010 y el 2012. Lerner se disculpó por esa conducta discriminatoria.

Lerner, una abogada de 62 años que entró en el IRS en el 2001, encabeza la división que decide qué grupos ameritan recibir la designación fiscal especial. Ha sido intensamente criticada por los legisladores de ambos partidos, incluyendo el representante demócrata Elijah Cummings, del Comité Supervisor, quien declaró el martes en una entrevista que la funcionaria podría ser cesanteada.

Ante el mutismo de Lerner, la figura estrella de la audiencia del miércoles fue Neal Wolin, secretario general del Departamento del Tesoro.

El inspector general de la Tesorería, J. Russell George, reconoció haber indicado a Wolin a mediados del 2012 que investigaba el acoso del IRS a los grupos conservadores, en un informe difundido la semana pasada. Ello indica que Wolin fue el funcionario de mayor rango de la Tesorería que estaba al tanto de esas investigaciones en las elecciones del año pasado.