Agencias
Guatemala, GUATEMALA.- El juez Miguel Ángel Gálvez resolvió este viernes aplazar la audiencia del proceso que se sigue contra el expresidente guatemalteco Otto Pérez Molina y dejar en prisión provisional al imputado.

El magistrado titular del Juzado B de Mayor Riesgo suspendió la audiencia de primera declaración abierta la víspera, que este día se prolongó por casi seis horas, y ordenó reanudar la sesión el próximo martes.

Gálvez indicó que necesitaba tiempo para estudiar los argumentos de las partes procesales y que hasta el próximo martes resolverá si dicta auto de formal prisión contra el exmandatario o concede alguna medida sustitutiva.

Futuro en juego

En la continuación de la audiencia del próximo martes, el juez Gálvez emitirá su resolución sobre someter o no a proceso a Pérez Molina por el caso de corrupción en la autoridad recaudadora de impuestos.

El expresidente permanecerá recluido en el cuartel militar Matamoros de la capital durante las elecciones generales del próximo domingo en que se votará por presidente, vicepresidente, 334 alcaldes, 158 diputados y 20 al Parlamento Centroamericano.

Los fiscales e investigadores del Ministerio Público (MP) y de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG, dependencia de las Naciones Unidas) expusieron sus pruebas de la participación del entonces mandatario en el grupo criminal dedicado al contrabando y defraudación.

Insistieron en la validez de las escuchas telefónicas autorizadas y solicitaron al juez dictar auto de procesamiento y prisión preventiva a Pérez Molina “por la posible comisión de tres delitos”, como son asociación ilícita, caso especial de estafa de defraudación aduanera y cohecho pasivo.

Acusaciones 'una payasada'

En su intervención, el abogado defensor, César Calderón, afirmó que Pérez Molina es víctima de un linchamiento social y condenado por la opinión pública, por acusaciones irresponsables e infundadas del MP.

De manera detallada, se encargó de desvirtuar uno a uno los tres delitos por los que está en prisión provisional y solicitó que se le desvincule del caso, por no existir indicios de haber cometido ninguno de los tres delitos que se le imputan.

Afirmó que el antejuicio (retiro de la inmunidad presidencial) fue “una farsa” y “una payasada”, y que la audiencia también estaría de más pues al parecer se tiene listo el fallo adverso, con base en las acusaciones sin sustento del MP.

Desde que se planteó el antejuicio para llegar a este proceso, el MP y la CICIG no han aportado elementos nuevos que justificaran el antejuicio y el proceso, que obligó a la renuncia de Pérez Molina a la Presidencia de la República, cuyo mandato de cuatro años concluía el próximo 14 de enero.

Calderón, en forma airada, también recriminó al juez y dudó de su imparcialidad, debido a que en declaraciones de prensa externó opinión del proceso y de manera anticipada sobre la culpabilidad del entonces presidente Pérez Molina.

Dijo que tuvo la oportunidad de recusar al juez Gálvez, pero se abstuvo con el propósito de que no se interpretara como un recurso de Pérez Molina para retrasar u obstaculizar el proceso.

El abogado defensor citó como ejemplo que de las 88 mil escuchas telefónicas sólo en una se hace mención al gobernante y que de ninguna manera lo implica en algún delito.

Este tipo de pruebas sin sustento contribuyen “a contaminar” a la sociedad, a la opinión pública que ya condenó al acusado, sin tomar en cuenta, como lo hace la parte acusadora, su derecho a la presunción de inocencia.

Por lo tanto, solicitó al juez Gálvez que otorgue “la falta de mérito en los tres delitos por los que se está procesando” a Pérez Molina.

Lo niega todo

En la primera parte de la jornada, antes de que el juez Gálvez ordenara un receso para el almuerzo, el acusado negó de manera tajante cualquier implicación con organizaciones criminales y actos de corrupción.

“No pertenezco a esa red criminal denominada ‘La Línea’”, declaró con energía Pérez Molina, un general retirado, de 64 años de edad, y por recomendación de su defensa se negó a contestar preguntas de la parte acusadora.

Una investigación del MP y de la CICIG desarticuló el 16 de abril al grupo criminal “La Línea”, dedicado al contrabando y la defraudación en la Superintendencia de Administración Tributaria. Por el caso renunció a la vicepresidencia y está en prisión Roxana Baldetti.

(Información de Notimex)