Miles de ahorradores e inversionistas extranjeros que vieron al Principado de Andorra una oportunidad de inversión y para diversificar sus activos, nunca pensaron que vivirían la peor de sus pesadillas, cuando optaron por resguardar sus capitales en esta desmantelada institución; no tenían ni la menor idea de lo que podía sucederles y literalmente, se les cayó el mundo encima.

“Para sostener sus mentiras y cargos falsificados desde el 2015, Andorra estaba compartiendo con México estas mentiras y falsedades para crear problemas para nosotros los mexicanos en nuestro país, ellos usan esa estrategia para crear problemas contra personas y evitar la guerra en su mismo País”, declara el abogado Salvador Padilla.

Ya han pasado más de cinco años desde que las investigaciones por parte de las Instituciones Financieras y el Gobierno de Andorra acusara a la Banca Privada de Andorra (BPA) de “lavado de dinero”, y que llevara a la postre al congelamiento de cuentas de miles de clientes que hasta la fecha continúan teniendo problemas para recuperar sus ahorros que ya fue demostrado por las mismas instituciones de regulaciones internacionales, son legales.

La siniestra vinculación de BPA al presunto blanqueo de capitales, dejó por los suelos la reputación del sistema bancario andorrano, lo que le ha valido perder la confianza y convertirse en una amenaza para las grandes fortunas y clientes con altos patrimonios que se vieron atraídos por el cobijo financiero que supone la protección del secreto bancario con cuentas offshore.

Uno de los empresarios declara: “En mi caso me invalidaron y me negaron representación legal en Andorra, mientras tienen mi dinero desde 2015. Ya interpusimos la denuncia ante la Corte Internacional y la ONU, por violaciones a los derechos Humanos y el debido proceso”.

Esta es la historia de la Banca Privada de Andorra, blanco de prácticas ilegales del mundo financiero y oscuros intereses políticos, tras un abortado movimiento independentista, que el Principado andorrano consintió y alentó, el cual sigue más vivo que nunca, aunque el Gobierno quiera pasar la página para evitar seguir hablando del caso y llegar incluso a la censura mediática contra las víctimas que también reclaman daño moral y reputacional.

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Los personajes:

Albert Hinojosa, presidente de la Agencia de Resolución de Entidades Bancarias (AREB) que fue creada para desviar los activos y esconder los datos y pruebas. Jordi Cinca, exministro de Hacienda de Andorra y contrabandista de diamantes, ambos señalados como el grupo de autores de este fraude como es mencionado en el documental.

Este fraude está afectando a varios empresarios mexicanos que tienen negocios transnacionales y al día de hoy no han tenido justicia por parte de las autoridades.

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