Ladrón acepta devolver lo que se robó ¡en cuotas!

La medida fue parte de la condena asignada al imputado, en una provincia de Argentina.

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Un hombre aceptó haber asaltado a una familia y acordó devolver lo hurtado en cuotas, en Rosario, Argentina. (Clarín)
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Mauro Aguilar/Agencia
SANTA FE, Argentina.- El golpe fue rápido y violento. El matrimonio estaba con su hija, recién llegada de La Plata, cuando los sorprendieron cuatro hombres armados que terminaron huyendo con dinero y la camioneta Toyota Hilux de la familia. Uno de los integrantes de esa banda cayó preso un año más tarde y ahora se convirtió en noticia por un inusual acuerdo que firmó en un juicio abreviado: admitió su culpa y ofreció resarcir a las víctimas. Así, les pagará $ 70 mil -en cuotas- por el daño ocasionado.

Como parte de un curioso acuerdo con la Justicia se comprometió a terminar en prisión el colegio secundario y aceptó entregar tres smartphones que le secuestraron para que sean utilizados por el Ministerio de Educación de Santa Fe, informa el portal de noticias del periódico El Clarín.

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De esta manera, Leonardo Ponce (31), padre de una hija, logró una condena a cinco años y medio de prisión efectiva, al unificarse en ese proceso cuatro causas penales que pesaban sobre él. El resarcimiento lo pagará con $ 20 mil que ya están depositados como parte del proceso judicial y otras cinco cuotas mensuales de $ 10 mil.

La fiscalía le había reclamado un resarcimiento de $ 100 mil, pero el abogado defensor planteó que no podría cumplir con esa cifra. Finalmente las partes acordaron que se abonen $ 70 mil. El dinero lo obtendrá de la venta de un coche que pertenece a su pareja, un Honda Civic modelo 2001.

Aunque ofreció entregar directamente el auto a la familia asaltada, incluso estimando que el valor era mayor a los $ 70 mil convenidos para el resarcimiento, la fiscal Georgina Pairola desestimó esa alternativa. Impuso que el pago se concretara con dinero en efectivo. Como la venta del auto podía demorarse convinieron hacerlo en cuotas.

“No sé si se corresponde con lo sustraído o no, pero es lo que podía pagar mi asistido. Tampoco podía ofrecerse cualquier cosa y que no se cumpliera”

“No sé si se corresponde con lo sustraído o no, pero es lo que podía pagar mi asistido. Tampoco podía ofrecerse cualquier cosa y que no se cumpliera”, explicó a Clarín Mariano Scaglia, abogado del joven.

En el convenio homologado por la jueza Marcela Canavesio se le impide, si fuera beneficiado en los próximos meses con salidas transitorias, acercarse a la familia a la que le abonará el dinero. Pesa una prohibición de acercamiento.

El día del robo

La particular resolución tuvo su origen en un robo cometido el 7 de septiembre de 2014 en una casa de Acebal, un pequeño pueblo de algo más de 5 mil habitantes ubicado 38 kilómetros al sur de Rosario.

Los ladrones ingresaron durante la madrugada, maniataron a un matrimonio y a una de sus hijas, quien había llegado desde La Plata para visitarlos. La banda cargó los objetos de valor en la Toyota Hilux de la familia. La abandonaron horas después en López -otra pequeña comuna santafesina-, luego de participar en un intento de entradera.

La familia asaltada en Acebal nunca se constituyó como querellante en el proceso. La fiscalía escuchó a sus miembros mientras tramitaba el acuerdo, pero la opinión de las víctimas no era “vinculante” para cerrar el juicio abreviado, explicaron en la Justicia.

“En delitos menores se hacen reparaciones económicas habitualmente. Lo que no es habitual es que se repare en estos casos más violentos y de penas mayores. En general quien firma una condena alta dice ‘firmo mis años y ya está. ¿Encima de que voy a estar seis años presos voy a reparar?’”, explicó Scaglia sobre las particularidades de esta resolución.

Las razones del ladrón

Ponce había sido detenido en 2015. Se le imputaban dos robos agravados por concretarse en banda, en lugar poblado, con armas de fuego y con privación de la libertad. Tenía, además, dos condenas por tenencia ilegal de arma de guerra y encubrimiento.

En caso de llegar a juicio podría haber recibido una pena no menor a ocho años de prisión. De allí la intención de su defensa para alcanzar un acuerdo que atenuara la condena. Para ello Ponce aceptó su culpabilidad y expresó arrepentimiento. Fue parte de un largo proceso que demandó dos años de negociación entre las partes.

El hombre está detenido en la Unidad Penal N° 16 de Pérez, al oeste de Rosario. En los próximos meses podría empezar a gozar de salidas transitorias. Su abogado asegura que dio pasos firmes -se capacitó en un oficio vinculado con la mecánica y retomó los estudios- para reinsertarse en la sociedad sin tener que volver a delinquir.

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