EFE
KINSHASA, RDC.- El Gobierno de la República Democrática del Congo (RDC) firmará el próximo lunes un acuerdo de paz en Kampala con el grupo rebelde M23, que esta semana anunció su abandono de la lucha armada tras más de un año y medio de conflicto con el Ejército y con las fuerzas de la ONU.

Según confirmó a Efe el portavoz del Gobierno congoleño, Lambert Mende, la firma del acuerdo será verificada por diferentes jefes de Estado de la región de los Grandes Lagos, en cuyas últimas reuniones ha estado muy presente el conflicto de la RDC.

Una vez "rendido" el M23, el portavoz pidió al resto de grupos guerrilleros que operan en el país, como las Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda, que abandonen también las armas, ya que de lo contrario el Ejército continuará luchando contra ellos.

El principal escollo del acuerdo de paz que se firmará el lunes se encuentra en la amnistía general que reclamaban los milicianos durante las conversaciones de paz anteriores.

Según avanzaron fuentes gubernamentales en medios locales, muchos de ellos no podrán ser indultados y deberán responder penalmente por sus crímenes de guerra.

Los rebeldes del Movimiento 23 de Marzo anunciaron su abandono de las armas el pasado martes a través de un comunicado oficial, poniendo fin a más de un año y medio de combates que han provocado cientos de miles de desplazados.

El fin de la rebelión llegó tras una ofensiva militar a gran escala lanzada por el Ejército congolés para desalojar a los insurgentes de sus últimos bastiones, ubicados en la conflictiva provincia oriental de Kivu del Norte.

El Gobierno congoleño celebró el cese de las hostilidades como una "vitoria militar innegable", y aseguró que rubricaría la paz "cinco días después" de certificar la seriedad de su compromiso, lo que coincide justo con el próximo lunes.

El M23 se constituyó el 4 de abril de 2012, cuando 300 soldados de las Fuerzas Armadas de la RDC se sublevaron por supuestos incumplimientos del acuerdo de paz del 23 de marzo de 2009, que da nombre al movimiento, y por la pérdida de poder de su líder, Bosco Ntaganda, alias "Terminator", actualmente procesado por la Corte Penal Internacional (CPI) por crímenes de guerra.

El pasado 20 de noviembre, el grupo tomó la estratégica ciudad de Goma, capital de Kivu del Norte (provincia fronteriza con Ruanda y rica en minerales), lo que motivó el desplazamiento de cientos de miles de personas.

La RDC está inmersa aún en un frágil proceso de paz tras la segunda guerra del Congo (1998-2003), en la que se vieron implicados varios países africanos.