Corte decidirá el futuro de Lula da Silva, acusado de desvío

Un tribunal de apelaciones decidirá si el ex presidente es culpable o no de corrupción.

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Lula fue condenado en 2017 a 9 años y medio de cárcel en el marco de la Operación "Lava Jato". (Foto: Proceso)
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Agencia
RIO DE JANEIRO.- Previo a que una corte de apelación que analice la condena, en primera instancia, de nueve años y medio de cárcel por corrupción, el ex presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, sostuvo un mitin ante miles de seguidores, donde señaló que tiene la "tranquilidad del inocente".

"No estoy aquí preocupado conmigo, sino con lo que está pasando con el pueblo brasileño", dijo Lula, ante miles de personas congregadas en Porto Alegre, ciudad del sur de Brasil donde este miércoles comenzará el juicio de apelación, publicó Milenio.

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Acompañado por la ex presidenta Dilma Rousseff, depuesta por un juicio político en 2016, y por miembros del Partido de los Trabajadores (PT), del que es fundador, Lula dijo que hubo personas en esa agrupación que "cometieron errores", pero aseguró que él es inocente. 

La fiscalía brasileña acusa al ex mandatario de estar en el centro de una trama millonaria de desvíos de recursos por medio de la estatal petrolera Petrobras.

Lula también fue muy crítico con la prensa brasileña, a la que tildó de "mentirosa" y "sin compromiso con la verdad", y aseguró que "solo la muerte" evitará que "continúe lo que está haciendo", en referencia a su plan de postularse a un tercer mandato en los comicios de octubre próximo.

"Tengo 72 años, pero estoy con la energía de 30", agregó, antes de fundirse en un abrazo con Rousseff.

Lula viajó después del discurso a Sao Paulo, desde donde asistirá al juicio, pues el tribunal rechazó que pudiera manifestarse en la sede judicial mañana, porque el procedimiento no lo prevé.

La ciudad de Porto Alegre, situada en el sur de Brasil, extremó las medidas de seguridad con un despliegue que incluye francotiradores, ante un juicio cuyo resultado podría agudizar la crisis política en el país. 

Lula, que se mantiene como el político con mayor intención de voto en Brasil, no se refirió a la sesión de mañana, pero reivindicó ante sus seguidores sus dos presidencias, de 2003 a 2010, al afirmar que convirtió a Brasil "en protagonista internacional".

"La izquierda no se unirá en torno a un candidato, sino a un proyecto (en las elecciones de octubre). No tenemos el derecho de permitir que por razones menores, la derecha" venza, dijo el ex mandatario, aunque el PT aseguró que no tiene un candidato alternativo o un "plan B" si Lula es inhabilitado en el juicio.

Lula fue condenado en julio a nueve años y medio de cárcel, luego que el juez Sergio Moro consideró que se benefició de la remodelación de un departamento de tres plantas en la localidad costera de Guarujá, en el litoral de Sao Paulo, a cambio de favores políticos a la constructora OAS.

Lula tiene otra media docena de causas abiertas aún sin juzgar, pero el juez Moro le permitió apelar la condena en libertad.

"La izquierda no se unirá en torno a un candidato, sino a un proyecto. No tenemos el derecho de permitir que por razones menores, la derecha" 

Sus abogados pidieron en la apelación que el ex presidente sea absuelto, pues no es dueño del inmueble, y en los alegatos finales arguyeron que la causa prescribió, pues los supuestos delitos habrían sido cometidos en 2009.

Tres jueces de apelación deben decidir este miércoles sobre el recurso, con un fallo cuyo impacto no está claro para el futuro político del ex presidente.

Juristas brasileños de diversas tendencias llevan semanas discutiendo en Brasil si la Ley de Ficha Limpia –que impide a condenados por corrupción en segunda instancia presentarse a elecciones- se aplicaría ipso facto en caso de que Lula sea declarado de nuevo culpable y eventualmente encarcelado.

Si dos de los tres jueces votan a favor de la condena, Lula tendría derecho aún a un recurso en la sede judicial, mientras que si hay decisión unánime algunos juristas indican que la sentencia sería firme y podría llevar a su encarcelación, y sólo quedaría la opción de recurrir al Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil.

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