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LONDRES, Reino Unido.- Un niño de 11 años murió en Reino Unido luego de que el automóvil donde viajaba se estrelló de frente con otro vehículo cuando su madre, quien iba conduciendo, salió de su carril al distraerse por una araña que había caído sobre su mano.

El arácnido provocó nerviosismo en la mujer, de nombre Cloud Younger, lo que asustó a su pequeña hija quien viajaba también en el auto. Al tratar de calmarla se distrajo y condujo por el lado equivocado de la carretera, lo que causó el accidente.

De acuerdo con información de Univisión, el pequeño fallecido, de nombre Tristan, viajaba en la parte trasera de carro en el momento del impacto. El informe final sobre las causas del accidente dado a conocer esta semana sobre los responsables del hecho detalla que el menor recibió diversos golpes que resultaron fatales.

El granjero David Glyndwr Jones, quien conducía el otro vehículo involucrado, relató que acababa de cargar 60 corderos en su remolque y partió con su esposa para ir al mercado en Builth Wells.

Justo antes de las 8:45 de la mañana del 4 de mayo de 2018, cerca de Olmarch, entre las comunidades de Llangybi y Tregaron, Jones notó que un automóvil azul se había desviado hacia el carril equivocado.

El impacto causó heridas leves en Jones, su esposa, la señora Younger y a su hija. Tristan fue el único que resultó lesionado de gravedad y a pesar de que fue trasladado en avión a un hospital, al llegar fue declarado muerto.

La madre (centro) es señalada como la responsable. (Internet)

El granjero David Glyndwr Jones, quien conducía el otro vehículo involucrado, relató que acababa de cargar 60 corderos en su remolque y partió con su esposa para ir al mercado en Builth Wells.

Justo antes de las 8:45 de la mañana del 4 de mayo de 2018, cerca de Olmarch, entre las comunidades de Llangybi y Tregaron, Jones notó que un automóvil azul se había desviado hacia el carril equivocado.

"Vi que el automóvil cruzaba la línea y luego siguió recto cuesta arriba hacia nosotros. Me dirigí a mi esposa y le dije: 'ella no va a parar'", detalló durante la audiencia de la investigación del caso.

El informe forense sobre el choque concluyó que todas las personas involucradas llevaban cinturones de seguridad, que las condiciones de la carretera eran buenas en el momento del choque y que ninguno de los autos involucrados tenía defectos preexistentes.

Matthew Fraser, investigador forense de la policía, comentó que Younger no tenía drogas ni alcohol en su sistema y agregó que "los actos del conductor son responsables de la colisión".

"Estoy seguro de que muchos automovilistas han tenido la experiencia de una abeja o una avispa entrando a la cabina y no pierden el control por eso. Si no hubiera estado distraída y se hubiera concentrado en el camino, habría tenido tiempo de hacer algo sobre la situación en los segundos que se desperdiciaron antes del incidente catastrófico”, afirmó el oficial.