Agencias
SAN SALVADOR, El Salvador.- Al menos 14 pandilleros murieron el sábado en el interior de la cárcel de Quzaltepeque al oeste del El Salvador y las autoridades presumen que se trata de una purga de miembros de la pandilla Barrio 18 Revolucionarios, recluidos en ese centro penitenciario, según informó Associated Press.

Catorce reos fueron encontrados muertos en el penal, 25 kilómetros al noroeste de la capital, informó a AP la oficina de comunicaciones de la Dirección General de Centros Penales. Se cree que se trata de una purga interna.

Decenas de periodistas trataron de llegar a la cárcel, pero las autoridades acordonaron la zona para cortar el acceso.

El secretario de Gobernabilidad del gobierno salvadoreño, Hato Hasbún, dijo en la estatal Radio Nacional que lo ocurrió "es producto de problemas internos entre la pandilla 18, hubo una situación complicada entre ellos con el resultado que todos conocen, nosotros estamos en permanente emergencia, pero la situación está totalmente controlada".

Los responsables de prisiones localizaron tres cadáveres cuando se realizaba el encierro de los reos, y al continuar la revisión encontraron otros once.

"Se presume que esta es una acción de depuración entre los pandilleros de la 18R", indicó la dirección de Centros Penales en su cuenta oficial de Twitter.

"Los fiscales ya se encuentran en la escena, esperemos que en el transcurso de las horas tengamos más información", indicó a su vez el Fiscal General de la República, Luis Martínez.

"Nosotros tuvimos información que estas situación se podía suscitar, aquí vemos una guerra cruel, insensata y sin sentido entre las mismas pandillas que sólo lleva dolor y luto a nuestra población", agregó

Martínez afirmó que las más recientes acciones de represión delictiva de las autoridades han "descabezado" a los grupos de esta pandilla.

"Lo que pasa es que con la efectividad que hemos tenido, la 18 Revolucionarios ha perdido muchos cabecillas que han sido capturados y otros han fallecido en enfrentamientos", explicó. Eso ha hecho que algunos miembros de la organización no quieran asumir puestos de liderazgo para no verse golpeados por las fuerzas de seguridad, señaló, y la banda "les está enviando un mensaje que tienen que asumir esos puestos para no quedar desarticulados".

La cárcel de Quezaltepeque alberga sólo a pandilleros del Barrio 18 de la facción conocida como Revolucionarios, uno de los grupos criminales más violentos que operan en el país y al que las autoridades responsabilizan de episodios de violencia reciente como el boicot del transporte público de pasajeros a finales de julio.

Según las autoridades, las pandillas, que tienen presencia en barrios y colonias populares, son responsables de la mayoría de crímenes que se cometen en el país.