Agencias
JERUSALÉN.- Aviones del régimen sirio bombardearon hoy varios suburbios de Damasco y el distrito de Ghouta Oriental, con un saldo de 26 muertos.

El ataque forma parte de la ofensiva para desalojar a los rebeldes de las áreas estratégicas en torno a la capital.

La aviación siria está golpeando ciudades y pueblos alrededor de Damasco, incluido Kfar Batna y Gesereen, mientras que las tropas leales al régimen atacan con artillería y morteros otros barrios, reportó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).

El OSDH indicó que las fuerzas del régimen están luchando contra los rebeldes en el suburbio de Daraya, un día después de que el Ejército capturó gran parte de esa área estratégica de Damasco, utilizado por rebeldes como base para atacar instalaciones oficiales.

En la localidad de Ghouta Oriental, a unos cinco kilómetros al este de Damasco, al menos 26 personas murieron, la mitad de ellos niños, durante un ataque aéreo de las fuerzas leales al presidente Bashar al-Assad.

La campaña aérea, con cohetes y artillería, es la más severa desde que los rebeldes capturaron una base de helicópteros y misiles cerca de Damasco hace dos meses y se atrincheraron en el principal aeropuerto internacional, acercándose a la capital.

Ghouta Oriental, controlado por los rebeldes, está situado cerca de Muleiha, donde se encuentra una estratégica base aérea del Ejército sirio y último gran enclave militar del área del este de Damasco que aún resiste la ofensiva de los insurgentes.

Los alrededores de Muleiha y los barrios obreros de Hazzeh, Kfar Batna y Duma, en Damasco, han sido los más afectados por los bombardeos sirios.

Los insurgentes llevan cinco días atacado la base de Muleiha con lanzagranadas y morteros, mientras el Ejército ha respondido con el lanzamiento de más de 600 cohetes.

"La base tiene muchos carros de combate y blindados, así como reservas de munición. Hay informaciones que señalan que el Ejército Libre Sirio ha destruido cinco carros de combate y un vehículo blindado", según el OSDH.

Además, las fuerzas sirias bombardearon la ciudad siria de Azaz, cerca de la frontera con Turquía, dejando al menos siete muertos y 34 heridos, mientras en la norteña ciudad de Alepo se libran cruentos combates cerca del edificio de la inteligencia.

Desde marzo de 2011, cuando estalló la revuelta popular que después se convirtió en una guerra civil, más de 60 mil personas han muerto, según cifras de las Naciones Unidas.