Agencias
BALTIMORE, Maryland.- La rabia se convirtió en tranquilidad en Baltimore este viernes, cuando la fiscal general de la ciudad acusó a seis agentes de diversos delitos graves -desde agresión hasta homicidio- por la muerte del afroamericano Freddie Gray.

Gray fue detenido de manera ilegal e injustificada, y se fracturó el cuello porque iba esposado y con grilletes en los tobillos, y fue metido con la cabeza hacia adelante en la camioneta policial, donde desatendieron reiteradamente sus pedidos de atención médica mientras rebotaba y se golpeaba dentro del pequeño espacio metálico del vehículo, dijo la procuradora estatal Marilyn Mosby.

La celeridad del anuncio de la procuradora tomó por sorpresa a la ciudad, menos de un día después de que la funcionaria recibiera el informe de la investigación interna del departamento de policía y los resultados de la autopsia oficial, publica The Associated Press.

También cayó como sorpresa la descripción detallada que Mosby hizo de las pruebas que sustentan las causas probables para fincar delitos graves a los seis agentes y que se basaron en parte en la pesquisa independiente que hizo el despacho a su cargo.

Serie de negligencias

La policía no tenía razón alguna para detener ni perseguir a Gray, declaró Mosby.

Los agentes acusaron falsamente a Mosby de portar una navaja de resorte, lo cual está prohibido, cuando lo que llevaba era una navaja de bolsillo, lo que sí está permitido.

El agente conductor de la camioneta y sus otros colegas no sujetaron a Gray en un asiento con cinturón de seguridad, lo que constituye una infracción directa a los procedimientos del departamento de policía, y desatendieron repetidamente las solicitudes del detenido de que le facilitaran atención médica, e incluso modificaron la ruta para recoger a otro detenido.

En cinco oportunidades los agentes omitieron ayudar a una persona lesionada a la que habían detenido injustificadamente y que ya no respiraba cuando la camioneta llegó a la estación de policía, afirmó la fiscal.

En el trayecto, "el señor Gray sufrió una lesión grave y crítica en el cuello por la forma como le colocaron las esposas y los grilletes en los pies y por la forma como lo colocaron sin cinturón de seguridad dentro de la camioneta del Departamento de Policía de Baltimore", agregó.

El anuncio de la fiscal Mosby suscitó celebración en las mismas calles del oeste de Baltimore que habían ardido hace apenas cuatro días después que el sepelio de Grey deviniera en disturbios y saqueos.

"Estamos satisfechos con los cargos de hoy", dijo el padrastro de Gray, Richard Shipley, en conferencia de prensa. "Estos cargos son un paso importante para hacer justicia para Freddie".

Preocupación policiaca

Sin embargo, un abogado que contrató el sindicato de la policía insistió en que los agentes no hicieron nada malo. El abogado Michael Davey afirmó el viernes que Mosby ha emitido "opiniones atroces y precipitadas".

"Tenemos graves preocupaciones sobre la imparcialidad e integridad del juicio contra nuestros agentes", señaló Davey.

Mosby rechazó una petición del sindicato de policías de que se hiciera a un lado y nombrara a un fiscal especial que se ocupe del caso, y señaló que los agentes honestos no deberían tener ningún problema cuando trabajan con fiscales en Baltimore.

Otros exagentes que estuvieron muchos años en servicio expresaron preocupación de que los cargos en contra pudieran amedrentar el proceder de otros policías.

Robert Leight, exdetective en Pennsylvania que trabajó para el FBI y fue fiscal federal así como abogado defensor, dijo que "el mayor peligro es que los agentes no cumplan sus deberes adecuadamente".

"La situación pone en peligro al agente, a los demás agentes a su lado y al público", señaló Leight. "Un policía debe reaccionar instintivamente tal como fue entrenado. Su reacción será tardía si se pone a pensar primero en las responsabilidades que incurrirá por su accionar", agregó.

Los policías acusados fueron fichados el viernes con cargos que van desde agresión hasta homicidio no premeditado con indiferencia depravada. Tres de los acusados son de raza negra también, de acuerdo con archivos judiciales. Los otros tres no especifican etnia o raza.