Agencias
SAN SALVADOR, El Salvador.- El exguerrillero Raúl Mijango confirmó el sábado que los cabecillas de las pandillas decidieron implementar una nueva "tregua" con el propósito de lograr la reducción de homicidios.

"El día 17 (de enero) hubo un acuerdo entre los miembros de pandillas de hacer un esfuerzo de hacer un nuevos gesto de buena voluntad", le dijo a The Associated Press el mediador de la tregua entre pandillas.

Explicó que la decisión tiene como propósito "demostrar que el problema de la violencia tiene solución y que es la vía del diálogo civilizado, lo que puede permitir resolver a corto plazo este problema".

Mijango afirmó que desde el 17 de enero se comenzó a experimentar una nueva reducción del número de asesinatos. "Inclusive el día 22 de volvió a tener cero homicidios y esto confirma mi tesis que sólo el diálogo (con las pandillas) es la vía más eficaz para reducir la violencia de manera rápida y más económica".

Ante el anunció de las autoridades de llevar a los cabecillas de las pandillas a una cárcel de máxima seguridad conocida como Zacatraz, donde perderán todo contacto con el exterior y no tendrán ningún beneficio penitenciario, Mijango afirmó que "eso va a complicar más las cosas y demuestra que no han aprendido la lección".

Recordó que cuando los cabecillas de las pandillas estuvieron recluidos en Zacatraz, el mando quedó en los más jóvenes y "éstos, más fanatizados por la situación de la violencia por el poder, se dispararon. No haber aprendido la lección me parece algo miope", agregó.

En la primera semana de marzo de 2012, los jefes de las pandillas Mara Salvatrucha MS13 y barrio 18 acordaron una tregua, en momentos en que se registraban al menos 14 muertes violentas al día. Los homicidios bajaron a cinco por día.

Para facilitar la comunicación con mandos medios para trasladar las órdenes de parar los homicidios, 30 reos de alta peligrosidad recluidos en Zacatraz fueron llevados a otras cárceles, donde se reunieron con el resto de los pandilleros.

Pero a finales de 2013, las pandillas intensificaron sus ataques contras las fuerzas de seguridad y las pandillas rivales y a principios de enero de 2015 volvieron a registrarse más de 14 homicidios diarios.

La tregua se rompió en septiembre de 2013, luego que las autoridades retirarán una serie de beneficios para los cabecillas de las pandillas presos en diferentes cárceles del país.

El presidente Salvador Sánchez Cerén ha dicho que no va a negociar con los pandilleros y advirtió que los perseguirá para llevarlos ante la justicia.

En El Salvador, considerado uno de los países más violentos del mundo, los pandilleros están involucrados en la mayoría de los crímenes. Estados Unidos declaró a la Mara Salvatrucha una organización criminal transnacional.

De acuerdo con las autoridades, 70 por ciento de los homicidios se atribuye a las pandillas y un 49 por ciento de las víctimas corresponde a miembros de esas estructuras criminales.