Agencias
SAN FRANCISCO, California.- La muerte de una joven de raza negra en un automóvil robado resultó ser el punto decisivo tras una serie de controversias que llevaron a la renuncia del jefe policial de San Francisco.

Ahora se ha nombrado a un comandante interino que tendrá la difícil tarea de reparar las maltrechas relaciones con la comunidad negra.

De acuerdo con The Associated Press, el subdirector Toney Chaplin, veterano de 26 años y quien es de raza negra, fue designado por el alcalde tras la renuncia el jueves de Greg Suhr. Chaplin cuenta con el apoyo de por lo menos una figura política clave.

"Toney Chaplin tiene el carisma, el carácter y el valor para dirigir este departamento", opinó el reverendo Amos Brown, presidente de la filial de San Francisco de la Asociación Nacional para el Progreso de la Gente de Raza Negra (NAACP, por sus iniciales en inglés).

Brown también había apoyado a Suhr a pesar de los momentos difíciles y había expresado que los problemas "no son culpa de un solo individuo".

Pero las presiones han ido en aumento desde diciembre, cuando cinco policías abatieron a un individuo negro que portaba un puñal. Desde entonces, han surgido protestas, intentos de reformar al departamento e investigaciones federales.

El alcalde Ed Lee apoyó al comandante policial en diciembre y lo volvió a hacer en abril, al publicarse mensajes de texto racistas intercambiados por policías. Pero horas después de la muerte de la mujer el jueves, Lee le pidió la renuncia a Suhr.

"El progreso que hemos alcanzado ha sido sustancial, pero no ha ocurrido suficientemente rápido", declaró Lee en un comunicado. "No lo fue para mí, no lo fue para Greg".

No fue posible contactar a Suhr el jueves para pedirle su comentario.

Los dos habían soportado juntos todos los escándalos: habían anunciado reformas en el departamento y habían solicitado al Departamento de Justicia investigar sus normas y procedimientos.

Suhr había sido criticado por no despedir a tiempo a varios oficiales que intercambiaron mensajes de texto racistas, incluso antes de ser comandante. Todos mantuvieron sus empleos porque Suhr no llegó a iniciar medidas disciplinarias cuando inicialmente se enteró de la conducta inapropiada.

Luego se reveló que otros policías también habían intercambiado textos racistas.

En enero, cuando el alcalde dio su segundo discurso de toma de posesión, fue abucheado por manifestantes que exigían la renuncia de Suhr. Poco después, otros manifestantes le impidieron a Lee pronunciar su discurso con motivo del Día de Martin Luther King Jr.