Agencias
WASHINGTON, D.C.- El procurador Eric Holder recibió este miércoles duros cuestionamientos de legisladores republicanos y demócratas por el espionaje a la agencia The Associated Press, incluida la acusación de que su Departamento de Justicia lesionó la Constitución del país.

En una comparecencia ante el Comité Judicial de la Cámara de Representantes, Holder fue cuestionado asimismo por su decisión de deslindarse del caso, a pesar que la ley indica que el procurador debe autorizar expresamente cualquier citatorio a la prensa, según informa Notimex.

"Me parece que las acciones del Departamento de Justicia han lesionado la Primera Enmienda" constitucional, señaló la demócrata de California Zoe Lofgren, en relación a la cláusula de la carta magna que consagra la libertad de expresión y de prensa.

"Los reporteros que con anterioridad hayan creído que una fuente confidencial hablaría con ellos, no tendrán ese mismo nivel de confianza", señaló la legisladora.

Holder defendió su decisión de recusarse del caso y hacerlo de manera informal, sin una notificación formal. Sostuvo que en tales casos el procurador adjunto James Cole asumió plenos poderes en la investigación sobre la pesquisa.

Asimismo, reveló que el caso de la AP no es aparentemente el único de espionaje a la prensa.

"No estoy seguro cuántos de estos casos he aprobado. Lo tomo seriamente. Sé que he rehusado aprobar varios y algunos otros pedí que se modificaran", añadió.

El presidente del Comité, el republicano Bob Goodlatte y otros legisladores, expresaron su interés en que Cole comparezca ante el panel para explicar sus decisiones en la investigación de la filtración informativa a la agencia noticiosa.

Aunque Holder dijo que transmitiría a Cole el interés del Comité, sostuvo que el funcionario difícilmente testificará sobre una investigación en marcha.

Cuando un legislador cuestionó a Holder si era importante que la recusación de casos fuera hecha de manera formal, por escrito, Holder aceptó que podría ser útil.

Antes el procurador dijo no recordar la fecha exacta en que se recusó del caso y aceptó que el interés que ha atraído la pesquisa justifica que se haga un análisis posterior sobre las acciones del Departamento de Justicia.

El Departamento de Justicia obtuvo los registros telefónicos de llamadas de reporteros y editores de la AP, como parte de una pesquisa criminal de información filtrada sobre una operación de la CIA en Yemen.

Esta operación reveló un fallido complot de al Qaeda en la primavera del 2012, para detonar una bomba en una aerolínea con destino a Estados Unidos.

Los registros obtenidos incluyen tanto llamadas de entrada como de salida, la duración de éstas y los números privados de reporteros y de las oficinas de la AP en Nueva York, Washington y en Hartfort, Connecticut.

La decisión del Departamento de Justicia recibió duras críticas editoriales este miércoles.