Quinto día de 'infierno' en un puerto de Brasil

Los accesos la terminal marítima de la ciudad de Santos fueron cerrados ante el descontrol del fuego.

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Más de cinco mil millones de litros de agua de mar han sido insuficientes para apagar el fuego. (diariodopoder.com.br)
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EFE
SAO PAULO, Brasil.- Las autoridades brasileñas decidieron bloquear hasta el jueves el tránsito de camiones a una de las terminales del puerto de Santos, el mayor de América Latina, a raíz del incendio, iniciado hace cinco días, todavía en dos de los seis tanques de combustibles y productos químicos afectados.

La decisión fue tomada por el gabinete de crisis instalado en la alcaldía de la ciudad de Santos, litoral del estado de Sao Paulo, en vistas a los trastornos causados por miles de camiones que están varados en la autopista Anchieta buscando llegar a las terminales portuarias.

Especialistas evalúan el impacto del incendio y del agua de mar usada para el combate del fuego, debido a que la toxicidad ha provocado mortandad de peces en algunos canales de la región de Santos, informó la Secretaría de Medioambiente del Estado de Sao Paulo.

Vecinos de la región denunciaron la mortandad de peces causados porque el agua utilizada para combatir las llamas regresaba, con polución, al mar.

Es por eso que, de acuerdo con la Asesoría de Prensa de la Secretaria de Medioambiente, se han tomado pruebas de agua y del aire de la zona para determinar su impacto ambientan en la población y en el ecosistema.

Fuego sin control

Unos cinco mil millones de litros de agua de mar ya fueron usados por unos 200 bomberos desde el jueves, quienes con mangueras de 650 metros de longitud y espuma suministrada por camiones cisternas para enfriar la temperatura ambiente al líquido combaten el fuego iniciado en tanques de combustibles y químicos de la empresa Ultracargo, del Grupo Ultra.

Esta empresa es la mayor compañía de Brasil dedicada al almacenamiento de líquidos, especialmente químicos, petroquímicos y combustibles.

Un portavoz del Cuerpo de Bomberos informó en la mañana de este lunes que el fuego estaba controlado, pero luego el gabinete de crisis rectificó que a causa del viento el gigantesco incendio aún precisaría de más horas para ser extinguido totalmente.

"Entre tres o cuatro días más deberá seguir impedido el tránsito de camiones para una de las dos terminales del puerto de Santos", informó a periodistas el vicegobernador del estado de Sao Paulo, Marcio França, al frente del comité de crisis y quien es del litoral paulista.

Apenas las cargas con alimentos perecederos y medicamentos serán autorizadas en la carretera Anchieta, la principal conexión del parque industrial de Sao Paulo, la capital regional y mayor regional y sus alrededores con el puerto de Santos.

Otra terminal ubicada en la vecina ciudad de Guarujá continúa en funcionamiento.
Los bomberos continuaban combatiendo a las llamas este lunes. El jueves, en el primer día, la temperatura ambiente en inmediaciones de los tanques era de 800 grados centígrados y hoy bajó a 600.

Aumenta preocupación

Por el momento se desconocen las causas del siniestro, que genera desde hace más de cien horas una densa humareda negra que si bien no causó víctimas fatales, preocupa a los vecinos del barrio de Alemoa.

El portavoz del Cuerpo de Bomberos de Santos, el capitán Marcos Palumbo, dijo que "no hay previsión" para el fin de los trabajos debido a que el viento tomó más intensidad en la región, lo que hace "aumentar la preocupación" para que las llamas no se expandan.

Dos tanques continúan en llamas, detalló Palumbo, y otros 21 están siendo enfriados. En total, desde el jueves, seis tanques fueron afectados y provocaron por lo menos siete explosiones, la primera en un depósito de tres millones de litros de diesel.

Al menos diez bomberos fueron retirados de los trabajos por problemas de intoxicación.

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