Coral Díaz/SIPSE
MÉRIDA, Yucatán.- Con programas formativos de medicina preventiva, el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores del Estado (Issste) advierte sobre los efectos colaterales que puede generar la automedicación, por lo que el suministro de antibióticos no recetados por un médico es responsabilidad del paciente.

El subdirector médico de la Clínica de Medicina Familiar “Mérida” del Issste, Mario Cervera Casanova, recordó que antes de que se restringiera la venta de antibióticos (ahora sólo se entrega bajo prescripción médica) el 80 por ciento de la población en algún momento de su vida mostraba resistencia a estos fármacos y, como consecuencia, era nula la efectividad ante algún padecimiento.

El galeno mencionó que en el Issste se manejan de manera cotidiana en el primer nivel de atención más de 350 claves de antibióticos, y para entender cómo funcionan, es útil saber que hay dos tipos principales de microorganismos que pueden causar enfermedades: las bacterias y los virus.

“Aunque ciertas bacterias y virus pueden causar enfermedades con síntomas similares, la manera en que estos microorganismos se multiplican y transmiten la enfermedad es diferente”, explicó.

El especialista detalló que las bacterias son microorganismos vivos formados por una sola célula y están por todas partes, la mayoría no causa daño, y en algunos casos hasta pueden ser beneficiosas, pero otras son dañinas y provocan enfermedades cuando invaden el cuerpo humano, además se multiplican e interfieren con los procesos normales del organismo.

Los antibióticos, dijo, son eficaces contra las bacterias, ya que matan a estos microorganismos impidiendo que crezcan y se reproduzcan.

Los virus, en cambio, no están vivos y no pueden existir por sí solos; son partículas que contienen material genético envuelto en una cubierta proteica, algunos pueden ser rechazados por el sistema inmunitario antes de que provoquen una enfermedad, pero otros, los que generan resfriados, por ejemplo, simplemente tienen que seguir su curso. 

“Los antibióticos son inútiles contra virus como el del resfriado y la gripe, ya que sólo sirven para combatir las bacterias”, refirió.

Cervera Casanova consideró importante que los pacientes sepan que el Issste sólo otorga antibióticos a sus derechohabientes mediante receta médica previa, donde un médico se responsabiliza de la prescripción de medicamentos con base en la patología presentada y los síntomas.

“Cada medicamento otorgado está respaldado por una receta médica, en apego a los estándares y la normatividad establecida por la Secretaría de Salud y por la dirección médica del instituto”, aseguró.